En octubre, los Recursos de Origen Nacional (RON) transferidos a las provincias por el Gobierno de Javier Milei mostraron una caída real del 5,1%. A la vez, la Coparticipación Federal de Impuestos (CFI), que representa una parte significativa de los ingresos provinciales, también disminuyó, al registrar un descenso del 6,8% interanual, según el último informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
En el caso de La Pampa, el impacto es del 5,7% menos, real, de recursos nacionales. Y un 6,2% menos en coparticipación. Eso tiene un impacto directo en las cuentas de Casa de Gobierno y, por supuesto, en las 80 localidades pampeanas: se sigue achicando la torta para repartir.
La nueva caída en la transferencia de los recursos nacionales a las provincias se produce ahora en un contexto desafiante para la Casa Rosada y para los gobernadores. Con el debate del Presupuesto 2025 a punto de entrar en ebullición en el Congreso, el Gobierno anunció el jueves pasado la creación del Régimen de Reparación Federal, que tiene por objetivo facilitar el saneamiento de las cuentas provinciales y de la Ciudad de Buenos Aires.
La iniciativa parece abrir una suerte de Plan Canje entre la administración central, que persigue el achicamiento del Estado al máximo, y las provincias, que intentan equilibrar sus cuentas tras el ajuste de este año.
Según el último informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el desempeño de los impuestos clave, como el IVA y Ganancias, fue dispar en octubre. Mientras el IVA retrocedió solo un 0,1% en términos reales, el Impuesto a las Ganancias tuvo una fuerte baja del 20,4%, en parte por la falta de los ingresos excepcionales observados en mayo. Este último mes, con un aumento de 82,9%, reflejó ingresos extraordinarios debido a la devaluación de diciembre.
Ninguna provincia fue ajena al declive de los RON. Santa Cruz sufrió la mayor caída, con un 7,3%, mientras que Misiones presentó la menor disminución, con solo un 1,1%. El promedio de las provincias marcó un -5,1%.
En cuanto a la CFI, todas las jurisdicciones experimentaron descensos entre 3% y 8%, resultado del debilitamiento del consumo y la actividad económica.