Un caso de sustracción reiterada sacudió a un establecimiento de cuidados geriátricos en Santa Rosa, donde una trabajadora habría aprovechado su posición de confianza para llevarse, poco a poco, dinero y pertenencias del lugar. La sospechosa, una mujer de 45 años, fue detenida tras una serie de operativos policiales que dejaron al descubierto el destino final de lo robado: mejoras en una vivienda particular.
Según fuentes de la investigación, todo comenzó cuando la dueña del geriátrico regresó de un viaje el pasado 26 de marzo y notó que algo no cerraba. Aunque el lugar se encontraba perfectamente ordenado, detectó la ausencia de varios objetos y una importante suma de dinero, específicamente 18.000 dólares, correspondientes a la reciente venta de un vehículo.
Las cámaras de seguridad y el análisis de movimientos en la zona fueron claves. Los investigadores de la Seccional Primera lograron identificar a la empleada del geriátrico, quien presuntamente utilizaba una modalidad de robo conocida como “hormiga”: pequeñas extracciones periódicas, imperceptibles a simple vista, pero constantes en el tiempo. La mujer habría enviado los objetos sustraídos desde el geriátrico hacia su domicilio valiéndose de servicios de mensajería, taxis e incluso un Chevrolet Corsa.
Con estos indicios, el personal policial obtuvo una orden de allanamiento para una vivienda ubicada en la calle María del Carmen Campos. Allí se encontraron materiales de construcción, aberturas nuevas, pilas de áridos y personal trabajando activamente en lo que parecía ser una obra de ampliación. Se sospecha que una parte considerable del dinero robado fue invertida en esa remodelación.
Los allanamientos no terminaron ahí. En una vivienda de la calle México, perteneciente a uno de los albañiles que colaboraba en la obra y que facilitó voluntariamente el acceso al lugar, fueron hallados electrodomésticos, una computadora, una consola Xbox y otros elementos reconocidos por la dueña del geriátrico como propios. En otro operativo en la calle Tello Sur al 1500, la policía logró incautar 1.200 dólares en efectivo.
La mujer, que había extraviado un juego de llaves meses atrás —detalle que cobró sentido con el avance de la causa— fue detenida y quedó alojada en la Seccional Sexta, imputada por el robo. En tanto, el propietario del vehículo involucrado fue notificado pero continuará en libertad mientras se esclarece su grado de participación.