Santa Rosa marchó en defensa de los jubilados y los derechos laborales

Una multitud copó las calles de Santa Rosa en la tarde del miércoles en una jornada de fuerte contenido social y político. Convocada por las centrales obreras, sindicatos y organizaciones sociales, la movilización tuvo como eje principal el acompañamiento a jubilados y pensionados, quienes encabezaron la protesta con reclamos concretos: medicamentos gratuitos, restitución de la […]

Una multitud copó las calles de Santa Rosa en la tarde del miércoles en una jornada de fuerte contenido social y político. Convocada por las centrales obreras, sindicatos y organizaciones sociales, la movilización tuvo como eje principal el acompañamiento a jubilados y pensionados, quienes encabezaron la protesta con reclamos concretos: medicamentos gratuitos, restitución de la moratoria previsional y jubilaciones dignas.

Desde las 18.30, la Plaza San Martín comenzó a llenarse con columnas de distintas agrupaciones gremiales y sociales. La actividad incluyó una junta de firmas promovida por sectores de jubilados y, ya entrada la noche, una marcha que recorrió las calles del microcentro con paradas simbólicas frente a las sedes de PAMI y ANSES, donde los reclamos se hicieron visibles con carteles y cánticos.

“Fue impresionante la convocatoria, más de cuatro cuadras de gente acompañando el reclamo”, expresó Ricardo Caso, uno de los referentes de los jubilados. Aseguró que el malestar no solo responde a la situación de ese sector, sino que representa a toda la clase trabajadora: “Defendemos el salario, la soberanía, la salud y la educación pública. Lo que está en juego es mucho más que un beneficio puntual”.

El tono de los discursos fue crítico hacia el gobierno nacional. Caso no dudó en calificar la situación como “insostenible” y pidió activar mecanismos institucionales para revertir las políticas que, según su visión, “profundizan el hambre, la entrega de recursos y el deterioro social”.

Este clima de malestar se enmarca en la previa del paro nacional de 24 horas convocado por la CGT, al que se suman las dos centrales pampeanas, la CTA y un amplio abanico de gremios. Desde diversos sectores anticipan un altísimo nivel de adhesión en áreas como educación, salud y administración pública.

Roxana Rechimont, secretaria general de ATE La Pampa, destacó la masividad de la movilización y consideró que la jornada “superó las expectativas”: “Estuvimos presentes todas las centrales sindicales, junto a movimientos sociales y espacios políticos. Fue una expresión clara del hartazgo y también una señal de organización”.

Además, cuestionó la política represiva del gobierno nacional y resaltó que, a pesar de los intentos de amedrentamiento, “la calle sigue siendo el escenario donde se disputa el rumbo del país”.

Por su parte, el gremio de choferes UTA anunció que no participará del paro. Aunque adhirieron simbólicamente a los reclamos, indicaron que en el contexto actual de negociaciones salariales y conciliación obligatoria, no tomarán medidas de fuerza. Sin embargo, dejaron en claro que si no hay avances en los acuerdos, están dispuestos a actuar.

Así, la provincia vivió una de las movilizaciones más significativas de los últimos tiempos, que se inscribe en una serie de protestas que se multiplican en todo el país. El mensaje, al parecer, fue claro: hay sectores que no están dispuestos a retroceder.