Rescatan a un hombre de 90 años que se había extraviado en una zona rural de Santa Isabel

La jornada del martes se tornó angustiante para una familia de la zona rural de Santa Isabel cuando Desiderio “Chileno” Cabral, de 90 años, no regresó tras salir a recorrer el campo. Sin embargo, la preocupación dio paso al alivio durante la madrugada, cuando el hombre fue encontrado en buen estado de salud, tras un […]

La jornada del martes se tornó angustiante para una familia de la zona rural de Santa Isabel cuando Desiderio “Chileno” Cabral, de 90 años, no regresó tras salir a recorrer el campo. Sin embargo, la preocupación dio paso al alivio durante la madrugada, cuando el hombre fue encontrado en buen estado de salud, tras un intenso operativo de búsqueda.

El hecho ocurrió en el puesto “El Escondido”, ubicado a unos 35 kilómetros de Santa Isabel, donde Cabral, un puestero de toda la vida, decidió salir a “campear” los chivos, como hace habitualmente. Pero con el paso de las horas y la caída del sol, la familia notó su ausencia y encendió las alarmas.

La neblina, la humedad del terreno y sus problemas de visión complicaron aún más el panorama. Carolina, una de sus nietas, fue quien dio aviso a la Comisaría Departamental, desde donde se activó rápidamente un operativo encabezado por el comisario Omar Sabaidini. Al esfuerzo policial se sumaron los Bomberos Voluntarios de Santa Isabel, quienes recorrieron la zona en medio de la noche.

Pasada la 1 de la madrugada, y luego de varias horas de búsqueda en el extenso campo, Desiderio fue hallado cerca de un corral, a apenas mil metros de la casa. Se había desorientado, pero estaba consciente y en condiciones relativamente buenas, considerando el clima frío y húmedo que había soportado. Fue trasladado al hospital Manuel Pérez para su evaluación médica, donde quedó internado en observación, aunque sin riesgo para su salud.

Lo llamativo es que esta no es la primera vez que ocurre algo así: hace cuatro años, Cabral vivió una situación similar, aunque en aquella ocasión la búsqueda demandó más de un día completo y se realizó bajo temperaturas mucho más extremas.

La posibilidad de utilizar perros rastreadores y drones ya estaba en análisis para el día siguiente, pero esta vez no hizo falta. La rápida acción del equipo de búsqueda, sumada a la familiaridad de Desiderio con el terreno, permitieron que todo concluyera de la mejor manera: con un reencuentro cargado de emoción y alivio.