En el marco del reciente anuncio del Gobierno nacional sobre la disolución de la Dirección Nacional de Vialidad, el ministro de Obras y Servicios Públicos de La Pampa, Alfredo Intronati, volvió a manifestarse en contra de la medida y advirtió sobre sus consecuencias. “Defendemos Vialidad Nacional porque es el único organismo que puede garantizar la transitabilidad en las rutas nacionales”, afirmó.
La eliminación del organismo vial, junto a la Agencia Nacional de Seguridad Vial y la Comisión Nacional del Tránsito y la Seguridad Vial, fue formalizada mediante un decreto presidencial, y plantea, entre otras cosas, la concesión de más de 9.000 kilómetros de rutas a empresas privadas.
En diálogo con la prensa, Intronati expresó su preocupación: “Desde la provincia venimos repudiando esta intención. Lo he manifestado como representante del Gobierno en la Comisión de Obras Públicas del Congreso y en el Consejo Interprovincial de Ministros de Obras Públicas”. También recordó la reciente manifestación en el Distrito 21 de Santa Rosa en defensa del organismo.
“Ese trabajo no lo puede hacer Gendarmería ni una agencia de seguridad vial. Pueden resolver cuestiones puntuales, pero no garantizar la transitabilidad en más de 40.000 kilómetros de rutas nacionales. El único organismo que puede hacerlo es Vialidad Nacional”, remarcó. Además, mostró preocupación por los 148 trabajadores que quedarían sin empleo en la provincia.
Para el funcionario pampeano, la medida responde a un “pensamiento ideológico” que busca “achicar el Estado a su mínima expresión”, abrir paso a privatizaciones y concesionar rutas sin asegurar una mejora sustancial: “Sólo se menciona repavimentación mínima, sin cambiar la fisonomía de las rutas. Incluso se plantea colocar cabinas de peaje, como en las rutas 5 y 188”.
Frente a este escenario, Intronati sostuvo que las instancias de diálogo “están agotadas” y que “todas las provincias vamos a terminar demandando al Estado nacional”. En esa línea, consideró que la acción judicial que ya inició Río Negro por el estado de la Ruta 151 podría sentar un precedente para otras jurisdicciones: “Participamos en mesas con Nación, enviamos notas, pero no responden. Solo queda la vía judicial”.
No obstante, planteó un interrogante clave: “Si no está Vialidad Nacional, ¿quién va a controlar los trabajos? ¿Quién va a contratar, certificar o auditar a las empresas?”.
El gobernador Sergio Ziliotto también se sumó a las críticas. Afirmó que el cierre de VN “no es una decisión que ahorra, es eludir responsabilidades” y denunció que “La Pampa ya está abandonada por el Gobierno nacional”. Concluyó: “Pedimos ayudar, recibimos solo silencio. Esto es despreciar a la Argentina real, la que trabaja y produce”.