El periodista y filósofo Martín Gak cuestionó duramente el alineamiento del presidente Javier Milei con Israel en el conflicto en Gaza, al que calificó como “bochornoso y escalofriante”. En declaraciones radiales, afirmó que esta postura podría traer consecuencias gravísimas para el país: “Argentina es un blanco blando, si se toma como enemigo a Irán no tiene cómo defenderse. Ya sufrimos dos atentados del terrorismo internacional”, recordó, en alusión a los ataques a la AMIA y a la Embajada de Israel.
“La actitud casi patotera de Milei puede tener un costo altísimo para Argentina”, advirtió Gak durante la entrevista con Radio Noticias. Aseguró que el mandatario “no tiene competencia en las cosas que dice” y lo definió como “un imbécil práctico”, en referencia a sus declaraciones y su posicionamiento internacional.
Gak también planteó que el país atraviesa un “colapso total de los mecanismos democráticos” y remarcó que el debate actual “ya no es sobre políticas públicas o económicas, sino sobre valores fundamentales”. En ese sentido, denunció el genocidio contra el pueblo palestino y la destrucción de la capacidad de reacción moral en gran parte del mundo. “No se puede justificar el asesinato de niños ni el bombardeo de hospitales. No estamos discutiendo impuestos, estamos discutiendo el exterminio de seres humanos”, afirmó.
El especialista subrayó que entre el 60 y el 80 por ciento de la población europea apoya sanciones contra Israel, fenómeno que —según dijo— también se replica en América Latina. Criticó con dureza a los medios de comunicación que justifican las acciones israelíes y denunció la “promoción de la desinformación por parte de un Estado mafioso como Israel, que actúa con títeres y agentes”.
“No hay derecho a defenderse cuando se ocupa y se reprime a una población entera. Bajo la burbuja del sionismo se ha deshumanizado a los palestinos, como si fueran una caricatura”, lamentó.
Por último, Gak hizo un llamado a no perder la capacidad de sentir horror ante lo que ocurre en Gaza. “Quien no tiene una reacción visceral ante las imágenes que se ven, no pertenece al género humano”, concluyó.