La subsecretaria de Educación de La Pampa, Marcela Feuerschvenger, confirmó ayer que el lunes volverán a las aulas los niños y niñas de las salas de 5 del nivel inicial y de tercero y sexto año del nivel primario. También las y los adolescentes de tercero y sexto año del secundario. Se trata de quienes el año próximo cambiarán de ciclo o de nivel y por esa razón son quienes iniciarán el cronograma
La funcionaria estuvo ayer en los estudios de CPEtv, donde grabó su participación en el programa La Parte y el Todo, que se emitirá hoy a partir de las 22. La funcionaria explicó que en la semana posterior, el 13, se incorporarán las salas de 4, el primero y segundo grado de la primaria y el primer y segundo año de la secundaria. Finalmente, a partir del 20, lo harán cuarto y quinto, tanto en primario como en nivel medio.
«Es un plan progresivo, gradual, que estamos trabajando con las instituciones educativas para refuncionalizar espacios, utilizar otros espacios que las instituciones tienen disponibles para una mejor distribución de los estudiantes. Esta semana es organizativa», explicó.
-El Ministerio habla con los gremios docentes, con las instituciones educativas. ¿Hablan con los padres y las madres?
-Con las familias se viene dialogando. Si algo trajo la pandemia y dejó instalado es un fuerte vínculo con la familia. Escuela y familia han establecido un vínculo que no era habitual. Hubo cosas que se desarrollaron más allá de la propuesta del docente, porque hubo una familia que acompañaba en el hogar. Y ahora, lo que pedimos a las instituciones educativas es que fortalezcan los lazos y los vínculos con las familias. En este tiempo, desde el 8 de marzo, con la modalidad de organización en burbujas, hemos recorrido mucho las instituciones y el diálogo con las familias es una de las cuestiones que vemos como fortaleza.
-La mayoría de los papás y las mamás ya comienzan un proceso de normalidad en sus trabajos y existe una necesidad de sincronizar los horarios.
-Lo sabemos. Trabajamos para facilitar la organización familiar. Pero también queremos ser muy cuidadosos. La Pampa dio una muestra el año pasado, el 14 de septiembre, porque fue la única que volvió con una presencialidad muy importante, porque llegamos al 20 de diciembre con 22 mil estudiantes. Y el 8 de febrero comenzamos a trabajar para hacer un acompañamiento a esos estudiantes. Y el 8 de marzo volvimos con todos los niños, niñas y adolescentes, pero organizados en burbujas. Esto ha sido acompañado por un proceso de vacunación muy efectivo. Hoy tenemos el 98 % de los docentes frente alumnos vacunados, con un 74% con segunda dosis. Hay 3.420 estudiantes vacunados, el personal no docente tiene un 98% de vacunación. Esto da tranquilidad y nos permite avanzar gradualmente y volver a una situación dentro de normalidad y con todos y todas en la escuela.
-¿Cuándo vamos a poder decir que el sistema educativo está funcionando como antes de la pandemia?
-Espero que para el 25 de septiembre estemos con una presencialidad completa en todas las escuelas. Es el deseo de todos los que estamos trabajando. Así lo tenemos planificado y están las condiciones dadas para que esto suceda.
-La pandemia introdujo cambios al sistema educativo. ¿Cuáles van a quedar de aquí en más?
-Más allá de la infraestructura, de una escuela más abierta, con otros espacios, rompiendo esa rigidez de la escuela tradicional, bancaria, creo que más allá de eso tiene que quedar un nuevo modelo pedagógico, un nuevo modelo de enseñanza y aprendizaje. Estamos trabajando muy fuerte sobre una evaluación formativa que tiene que ver con los distintos procesos de aprendizaje de los estudiantes.
-¿Cambios en la forma de avaluar?
-Claro. Y eso cambia a partir de una reorganización y priorización de saberes, de un trabajo con proyectos, con aprendizajes basados en problemas, con propuestas integradas que están desarrollando las instituciones, porque la calificación es un resultado de un proceso.
-La pandemia es una crisis que ha dado la posibilidad de un salto.
-De toda crisis nace una oportunidad. En este caso, nos ofrece la posibilidad de un salto cualitativo. Por supuesto que hace años que venimos hablando de la evaluación formativa, pero la pandemia ha acelerado este proceso y esto hay que acompañarlo con formación docente continua.
-Hoy las miradas están divididas entre los que creen que la pandemia generó un impacto negativo en la educación y los que ven que se logró incentivar el trabajo áulico en el hogar. ¿Qué impresión tienen de esto los docentes?
-La pandemia nos llevó a valorar mucho más la escuela como institución y el vínculo que se genera en el aula, porque ahí hay un vínculo único que la pantalla no puede reemplazar. Acá hicieron un gran esfuerzo los niños, las familias, los docentes para trabajar en el formato pantalla, pero en la recorrida de estos días por las escuelas, hemos podido ver la felicidad que le produjo a los niños el regreso al aula. El aula es un ámbito de socialización y de construcción de saberes irremplazable. Para los docentes no es lo mismo una explicación en el aula que por Zoom. La tecnología vino para quedarse pero como herramienta y no como el vínculo o el nexo educativo. Los niños, las familias, prefieren la presencialidad. Pero también han sucedido algunas situaciones que los aislamientos provocan, entonces hoy la escuela recibe otras problemáticas y venimos desarrollando un programa de apoyo focalizado para los estudiantes con discapacidad, porque el aislamiento tuvo sus consecuencias en ellos.
-¿Cómo va a ser la promoción?
-El año pasado definimos por resolución ministerial una unidad pedagógica 2020-2021. Hubo algunos que promocionaron a fines del año asado, porque los aprendizajes estaban afianzados. Después volvimos el 8 de febrero, justamente, para continuar acompañando.
-¿Y el calendario escolar?
-Va a ser el mismo que el del año pasado, con finalización en diciembre. Nuestros calendarios escolares históricamente fueron al 28 de febrero del año siguiente, entonces ahí vienen los períodos que antes se llamaba de compensación y ahora son de acompañamiento permanente.
Aprobaron cambios en los protocolos.
Desde el Ministerio de Educación de La Pampa informaron que, en el marco de la Comisión Mixta de Salud y Seguridad en el Trabajo (Comisset), se aprobaron modificaciones en los «Lineamientos Generales y Protocolo de Actuación para el Regreso Presencial a las Aulas», con el objetivo de avanzar de forma gradual y progresiva hacia la presencialidad plena en las escuelas pampeanas.
«Sin renunciar al cuidado de la salud, la variable que se flexibiliza, en los casos que fuera necesario, es la del distanciamiento social, siempre y cuando se intensifique aún más el resto de las medidas preventivas sanitarias», explicaron a través de un parte de prensa. En esa línea, indicaron que «la normativa fue enviada a las instituciones educativas de la Provincia y próximamente se encontrará disponible en formato digital en la página web del Ministerio de Educación Provincial».
A su vez, recordaron que la Resolución ME N° 670/21 «establece que, desde el 6 y hasta el 24 de septiembre de 2021, se completará el proceso de regreso gradual y progresivo a la presencialidad en todas las instituciones y servicios educativos y en las instituciones de Formación Profesional».
Tres medidas.
Por su parte, la secretaria general de Utelpa, Lilia López, explicó en Radio Noticias que en la reunión del Consejo Federal de Educación -realizada el pasado jueves con la presencia de autoridades de todo el país- se aprobó una resolución «donde se propone la vuelta a una presencialidad plena, pero siempre con esta mirada de que en cada jurisdicción se debe adecuar esa resolución acorde a la realidad de cada provincia».
En el caso de La Pampa, la Comisset analizó el protocolo vigente para detectar qué aspectos hay que modificar «para poner en marcha esta mirada de una presencialidad plena».
«La resolución es muy clara, tiene tres puntos fundamentales: el distanciamiento de un 1,50 metros que es lo que teníamos hasta ahora, la segunda opción es 90 centímetros y la excepcionalidad, que está medio descartada, de 50 centímetros», detalló.
En esa línea, consideró que este último punto «es muy complejo» porque para la distancia de medio metro es necesario utilizar triple tapaboca. «Tiene otros requisitos y por eso digo que eso medio que se descarta», indicó.
«Hay cinco o seis colegios secundarios muy grandes en la provincia que también se está analizando si se continúa como esta, no va a haber mucha modificación por la cantidad de población que tiene el edificio. Se está analizando cada situación, cada lugar, y nosotros nos parece correcto que el Ministerio de Educación haya tomado esta definición clara de que en La Pampa se va a volver con un trabajo gradual, que para nosotros eso es fundamental», remarcó.
Últimos años.
La dirigente enfatizó en que «se va a seguir en la Comisset como lo venimos trabajando desde el momento que empezamos a tener esta pandemia, con la seriedad y el compromiso que esto merece, así que vuelvo a resaltar esto: gradualidad».
A su vez, explicó que en esta etapa se priorizará los años de fin de ciclo. Se trata de las salitas de cinco, tercer y sexto grado de la primaria, tercer, sexto y séptimo año de secundaria «para luego ir avanzando gradualmente con el resto de los cursos».
«En aquellos lugares que se pueda, siempre que estas condiciones epidemiológicas estén como en la actualidad», aclaró. Esta definición adoptada implica que «no todas las escuelas el lunes 6 van a volver con los ciclos terminales porque a lo mejor todavía no tienen adecuado el edificio para hacerlo, lo harán en la medida que se pueda cumplir con el protocolo de cuidado». Finalmente, transmitió tranquilidad a las familias e informó que cada institución comunicará como corresponde.