Un hombre de 25 años fue condenado hoy a tres años de prisión efectiva por ser autor de los delitos de amenazas simples, daño Simple y lesiones graves calificadas por la relación de pareja preexistente; en concurso real. La víctima fue una expareja.
El conflicto penal se resolvió por la vía alternativa del juicio abreviado, convenido entre la fiscala María Micaela Succurro, la defensora oficial Mariel Annecchini y el imputado, Gabriel Sebastián Cerda, quien admitió su culpabilidad.
Los hechos fueron tres y ocurrieron entre abril y junio de este año. En una ocasión golpeó con un palo a la mujer en el brazo izquierdo, provocándole una fractura en el antebrazo. Luego daño los vidrios de dos puertas de la vivienda de la víctima. Y, finalmente, una madrugada ingresó a ese domicilio, dañó los cables de la luz y se apoderó del documento de identidad de la expareja y de las llaves del departamento.
La condena fue dictada por el juez de control, Néstor Daniel Ralli, quien revocó una pena condicional a tres años de prisión –que le había sido impuesta a Cerda en 2020 en Cipolletti, Río Negro, por encubrimiento por receptación sospechosa con ánimo de lucro– y dispuso la pena única de tres años de prisión de cumplimiento efectivo.
La víctima, al ser informada de los alcances del abreviado, dio su conformidad y –haciendo uso de sus derechos– pidió ser informada cuando su agresor recupere la libertad.