Así lo definió la AFA junto a la Confederación brasileña y la FIFA, que en un primer fallo había dispuesto que se juegue, en la disputa en el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
Así lo definió la entidad junto a la Confederación brasileña y la FIFA, que en un primer fallo había dispuesto que se juegue, en la disputa en el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).
“La AFA y la CBF han aceptado sus respectivas responsabilidades por los hechos que dieron lugar a la suspensión del Partido, tal y como fue constatado por los Órganos Judiciales de la FIFA, y que deben asumir la sanción correspondiente”, inició el organismo en un comunicado, en relación al encuentro suspendido el 5 de septiembre de 2021.
Y agregó: “Como consecuencia, se ordenó a la AFA pagar una multa total de CHF 150.000, la mitad de la cual se suspendió por un período de prueba de dos años. La mitad de la multa a pagar (25% de la multa total) será donada directamente por AFA a la Organización Mundial de la Salud (OMS), en apoyo a sus esfuerzos continuos para combatir el Covid-19”.
Además, remarcó: “Finalmente, el partido Brasil-Argentina ya no se volverá a jugar, por lo que la fecha correspondiente permitirá que nuestra selección dispute en su lugar un encuentro amistoso de preparación para el Mundial de Qatar 2022”.
En esa línea, cerró: “AFA desea agradecer a la FIFA por su disposición y disponibilidad para resolver este problema en estas circunstancias tan específicas y en un corto período de tiempo”.
Lo que motivó todo el conflicto en ese entonces fueron los ingresos de los jugadores Emiliano Buendía, Emiliano “Dibu” Martínez, Giovani Lo Celso y Cristian “Cuti” Romero, quienes militaban en Inglaterra -Lo Celso en la actualidad juega en el Villarreal de España-.
Inglaterra tenía una restricción para las personas que desde allí ingresaran a Brasil, por lo que las autoridades sanitarias sostuvieron que debían permanecer en cuarentena y suspendieron el juego por sus presencias en la cancha.