La entidad volvió a subir la tasa luego del ajuste realizado en agosto. Sus proyecciones de inflación plantean que esta estará encima del 10% por varios meses más.
El Banco de Inglaterra aumentó este jueves las tasas de interés en 50 puntos básicos, en consonancia con lo esperado, con el objetivo de contener el fuerte incremento de la inflación.
Así, los tipos de interés en Reino Unido se sitúan en el 2,25%. La suba se dictó después de que se conociera que la tasa anual de la inflación en el país para agosto aumentó un 9,9%. Si bien el dato mostró una ralentización en comparación con el 10,1% de julio, todavía se mantiene muy por encima del 2% fijado por el Banco de Inglaterra como meta anual y se sostiene como la más alta entre los países del G7.
La institución monetaria ya había aplicado en agosto una suba también de 50 puntos básicos, el mayor incremento en 27 años, a pesar de advertir de los riesgos de recesión, para contener la inflación que se ubica en su nivel más alto en los últimos 40 años.
El Banco además amplió sus expectativas sobre la inflación: proyecta que esta se mantenga por encima del 10% durante unos meses más, una vez pasado octubre, mes para el cual espera que la suba general de precios se mantenga en el 11% interanual.
El continente está a semanas de comenzar el período invernal, con una crisis energética en desarrollo. Los precios de la energía se dispararon desde el comienzo de la guerra en Ucrania y se sostienen todavía altos. Rusia suspendió la provisión de gas al continente y amenazó con suspender todos los suministros si el G7 insiste con fijar topes máximos de precios al petróleo ruso.
El Reino Unido ya tomó medidas para reducir el impacto de los precios de la energía en el costo de vida: congelaron los precios de las tarifas domiciliarias por dos años y los de las empresas por seis meses. Además anunciaron la quita de impuestos al fracking para estimular la producción de hidrocarburos.
La suba de tasas es una medida que se está tomando en todo el mundo con el objetivo de contener la inflación. Este miércoles la Reserva Federal de Estados Unidos aumentó su tasa de interés a un rango de 3%-3,25%. Una medida similar tomó el Banco Central Europeo (BCE) que aplicó la mayor suba en su historia, a pesar del temor de algunos directivos que la tasas ingresen en un terreno contractivo e impacten en la actividad. La misma preocupación expresaron algunas empresas, que alertaron sobre el efecto de estas medidas en la economía.