Los brasileños votan este domingo en las elecciones generales más cruciales de los últimos 30 años, con el expresidente de izquierda Luis Inácio Lula da Silva como favorito a desbancar a su rival el mandatario ultraderechista Jair Bolsonaro.
Las mesas abrieron puntualmente a las 8 y deberían cerrar a las 17, cuando la Justicia electoral dará inicio al escrutinio, que se espera ya muestre una tendencia consolidada unas dos horas después.
Más de 156 millones de brasileños estaban habilitados para participar de los comicios, en los que se elegirá presidente, los gobernadores de los 27 estados, 21 senadores, 513 diputados federales y más de 1.000 legisladores regionales.
Para la elección se dispusieron 577.000 urnas electrónicas.
Las elecciones se celebran en medio de un clima de tensión provocada por una violencia política inédita durante la campaña y por amenazas de Bolsonaro, de 67 años, de no reconocer los resultados.
Tres votantes del Partido de los Trabajadores (PT), de Lula, fueron asesinados durante la campaña por activistas bolsonaristas en los estados de Paraná, Mato Grosso y Ceará, según indicó la policía.
El mensaje de Bolsonaro
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó horas antes del inicio de la elección de este domingo, que obtendrá la reelección con el 60% de los votos, contrariando todas las encuestas que dan favorito al opositor Luiz Inácio Lula da Silva.
“La verdad es que yo veo una victoria con más del 60% de los votos porque tenemos mucha gente en la calle. La gente sale a demostrarnos espontáneamente cariño”, dijo Bolsonaro.
El mandatario, desde Río de Janeiro, pidió “elecciones transparentes” al Tribunal Superior Electoral, luego de más de un año denunciando un plan fraudulento, sin pruebas, para perjudicarlo mediante la manipulación del sistema de urnas electrónicas.
“Dios nos ayude a que todo salga bien, que todo funcione, en especial en Brasilia, con decencia, transparencia, para poder ver el resultado final del escrutinio”, afirmó Bolsonaro.
El mensaje de Lula luego de votar
En tanto, Lula habló con los medios después de votar y dijo: “Hoy estoy aquí, votando con el conocimiento y mi total libertad para tratar de hacer un país que vuelva a la normalidad. Para intentar que haya empleo, salario, educación, respeto. Y agregó: “Vamos a tener que cuidar a cada uno de los 150 millones de habitantes, para que este país pueda recuperar el derecho a ser feliz. La gente va a votar para ser feliz. La gente quiere trabajar, tener un salario digno y cuidar a su familia. Este país va a ser mucho mejor”, dijo Lula.
Las encuestas
Según la más reciente encuesta de Datafolha, el mandatario ultraderechista, del Partido Liberal, tenía 37% de intención de voto contra el 50% de Lula, del Partido de los Trabajadores. Esto pone al expresidente de izquierda con chances, dentro del margen de error, de ganar en primera vuelta con la mitad más uno de los votos.
Otra encuesta, de Ipec para TV Globo, indica que Lula recibiría el 51% contra el 36% de Bolsonaro.