La Selección conducida por Eduardo Gallardo jugó un muy buen partido, pero cayó con Brasil 19:26 por la última fecha del torneo subcontinental que se celebró en La Casa del Handball Argentino. Antes de ayer había conseguido la clasificación al Mundial que se jugará a fin del año que viene en Noruega, Dinamarca y Suecia.
Bajo un marco imponente de público que se hizo presente en el Pabellón Oceanía del Parque Olímpico de la Juventud, Argentina no pudo con Brasil en el partido decisivo del Sur-Centro y se colgó la medalla plateada. El torneo que significó el reencuentro de la Selección con su gente tras el Panamericano 2017 disputado en SAG Ballester, quedará en los registros como la primera competencia oficial de una Selección Adulta nacional en el estadio propio inaugurado este mes.
La Garra llegaba a una nueva edición del clásico sudamericano tras vencer en el debut a Uruguay 29:17, Paraguay 25:17 y Chile 26:18, victorias que ya le había asegurado la clasificación al Mundial y al menos el subcampeonato. En el certamen que se disputó bajo el formato de todos contra todos, la Selección trasandina se quedó con el bronce.
En uno de los mejores partidos ante Brasil de los últimos años, la Selección vendió cara la derrota teniendo un buen rendimiento a lo largo de los sesenta minutos, sumando pocas pérdidas en ataque y realizando un intenso trabajo defensivo. Elke Karsten, con 6 tantos, fue la máxima goleadora de un equipo que llegó a estar arriba hasta los últimos minutos del primer tiempo, en el cual se fue al descanso 11:14 abajo, y que dio batalla hasta el final del encuentro.
Argentina y Brasil se quedaron con las dos plazas en juego para el Mundial 2023 que ponía en juego la 3° edición del certamen subcontinental. La Selección Femenina registrará su duodécima vez participación en la historia de los Mundiales -será la undécima consecutiva- desde su primera aparición en Dinamarca/Noruega 1999. En Buenos Aires, Brasil se quedó con su 7° título continental consecutivo desde la consagración en el Panamericano Sao Bernardo do Campo 2011.
Un gol de Joana Bolling desde el extremo tras una buena circulación entregó las primeras buenas sensaciones en ataque, una constante durante los primeros treinta minutos, principalmente en los veinte iniciales en donde La Garra prácticamente no tuvo pérdidas. Ni siquiera un esperado alto rendimiento de Bruna de Paula en la primera línea brasilera, que marcó cuatro de los primeros cinco goles y fue la máxima artillera del partido con 10 tantos, achicó a una defensa que también respondió cuando se la necesitó.
En ese contexto, y con un aliento incansable del público, Argentina no solo dio vuelta el tablero con una brillante actuación de Elke Karsten y Giuliana Gavilan (siete goles en el primer tiempo entre ambas), si no que pasó al frente 6:5 en el minuto 11. Energía positiva, sostenida en las primeras atajadas de Marisol Carratú y una defensa que siguió mostrándose intensa, que se extendió durante varios minutos hasta el 10:8 arriba tras un gran gol de Sofia Rivadeneira a pie firme.
El ingreso de Ana Paula a la primera línea brasilera le cambió la cara a un ataque brasilero que hasta ese entonces había estado incómodo, varias veces llegando a tener que resolver en el pasivo y sin poder sumar de contrataque, para con un parcial 6:1 en los minutos finales irse al descanso 14:11 arriba aprovechando también algunas malas decisiones en el ataque albiceleste.
Un cambio en la defensa de Brasil también le generó unos minutos de incomodidad a La Garra que en el complemento necesitó de 8 minutos para marcar su primer tanto, firmado por Campigli de penal. Pero superado ese mal pasaje en el cuál las brasileras pudieron por única vez en el partido correr la cancha y sumar algunos goles de contraataque y sacar la máxima del partido, 19:12 en 10 minutos, Argentina ajustó y volvió a dar batalla.
Un gol de Macarena Sans no solo reactivó el posicional argentino, que recuperó un poco de la fluidez mostrada en el primer tiempo, si no que también reavivó la llama en la gente. Ese constante aliento envalentonó a las chicas argentinas y a una defensa que también pudo regresar a su nivel, contactar más y volver a recuperar pelotas. Ayelén Rosalez tuvo algunas intervenciones importantes en el arco, Campigli se transformó en el termómetro de la Selección con un excelente trabajo en ambas áreas y La Garra resurgió.
Si bien en el tablero la recuperación no fue total, porque llegó a descontar a cinco, 16:21 en 19 minutos, y tuvo pelota para acercarse aún un poco más, la Selección dejó vivo su espíritu de lucha hasta el sonido de la chicharra y un final de tablero con triunfo de Brasil 26:19.
Formación inicial: Marisol Carratú, Rosario Urban, Sofia Rivadeneira, Micaela Casasola, Elke Karsten, Joana Bolling y Giuliana Gavilán.
Argentina (19:26 vs. Brasil): Elke Karsten (6), Rocío Campigli (4), Giuliana Gavilán (3), Micaela Casasola (1), Joana Bolling (1), Sofia Rivadeneira (1), Ayelén García (1), Macarena Sans (1), Lucila Dalle Crode (1), Rosario Urban, Antonela Mena, Delfina Ojea, Macarena Gandulfo, Manuela Pizzo, Ayelén Rosalez, y Marisol Carratú