El combustible de aviación sostenible SAF llegó para quedarse. Solo falta continuar investigando e igualar las condiciones de acceso y producción en las distintas regiones del mundo para así cumplir el Objetivo 2050.
El futuro sostenible está en la agenda del mundo aeroespacial. Con la visión en cumplir la meta de cero emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) para 2050, el combustible de aviación sostenible (Sustainable Aviation Fuel, SAF, por sus siglas en inglés) aparece como una de las opciones más sustentables y utilitarias para el funcionamiento correcto de las aeronaves. En algunos casos, se lo menciona como el “futuro de la aviación comercial”. Sea cual sea la denominación, la realidad es que América Latina -comparada con otras partes del mundo- le queda mucho por recorrer, producir y abastecer.
Se calcula que el sector de las aerolíneas es responsable del 2,5% de las emisiones globales de GEI, equivalentes a más de 900 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2). La investigación del Instituto de Massachussets (MIT, por sus siglas en inglés) -publicado en Environmental Research Letters de IOP Publishing– aseguró que “las emisiones de CO2 atribuibles a la aviación aumentaron anualmente 2.6% en promedio durante los últimos 25 años (Agencia Internacional de Energía 2017)”.
En ese marco negativo, el SAF toma protagonismo, ya que reduce hasta el 80% de las emisiones de carbono a lo largo del ciclo de vida del combustible, en comparación con el combustible de aviación tradicional al que sustituye. Todo depende del tipo de materia prima sostenible que se utilice, el método de producción y de la cadena de suministro en el aeropuerto.
Además, resulta de “introducción”, es decir, está mezclado con hasta un 50% de combustible para aviones convencional, que no requiere modificaciones en la aeronave. Los principales componentes son: biomasa (material orgánico renovable proveniente de plantas y animales), desechos agrícolas y forestales, aceites y grasas usadas, y residuos municipales.
En tanto, hay siete formas de producción de SAF, todas certificadas por la agencia de estándares ASTM International. Entre todas, hay una basada en la vía de ésteres (compuestos orgánicos) y ácidos grasos hidrotratados (HEFA) que resulta ser uno de los productos más comúnmente utilizados y comercialmente disponibles en la actualidad.
Airbus
Desde 2011, y según la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) que definió el compromiso de lograr reducir a cero las emisiones netas de carbono por parte de toda la industria y fue validado por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), despegaron más de 45 mil vuelos comerciales utilizando SAF y más de 50 aerolíneas tienen experiencia con el combustible, principalmente en Europa y EEUU.
La producción alcanzará al menos 300 millones de litros en 2022, que significa un aumento del 200% respecto de la producción de 2021, que había sido de 100 millones de litros, según los datos suministrados por la IATA.
No obstante, hay cálculos optimistas que estiman que la producción total en 2022 podría alcanzar los 450 millones de litros, un escenario que coloca a la industria SAF al borde de un aumento exponencial de la capacidad y la producción hacia un punto de inflexión identificado de 30.000 millones de litros para 2030, con las políticas de apoyo adecuadas.
De todas formas, el problema actual es que la producción global de SAF representa el 0,03% del uso de combustible (según cifras previas a la pandemia) y el año pasado fue menos del 1% de los vuelos operados. Aquellas cifras repercuten fuertemente en América Latina, donde la situación es adversa a las demás regiones.
“No existe un remedio mágico que va a permitir abastecer todas las emisiones, sino que va a ser una canasta de medidas. Ahí es cuando aparecen los combustibles sostenibles, que son de tercera o cuarta generación, y no buscan competir con la agricultura tradicional. Sumado a que hay varios tipos y, por eso, hay diversas formas de fabricarlos, un aspecto que permitirá a muchos países contribuir al objetivo 2050“, aseguró -en exclusiva con Ámbito- Guillaume Gressin, vicepresidente Internacional, Estrategia y Operaciones Comerciales de Airbus -empresa francesa pionera en la industria aeroespacial sostenible.
Por su parte, Willie Walsh, director general de IATA, dijo que “hubo al menos el triple de la cantidad de SAF en el mercado en 2022 que en 2021. ¡Y las aerolíneas usaron cada gota, incluso a precios muy altos! Si hubiera más disponible, se habría comprado. Eso deja en claro que se trata de un problema de oferta y que las fuerzas del mercado por sí solas son insuficientes para resolverlo”.
Aerolíneas Argentinas y SAF
Aerolíneas Argentinas tiene previsto establecer una agenda integral para acceder al SAF mediante un trabajo conjunto entre organismos estatales y empresas privadas el próximo año, según indicaron fuentes de la compañía. En ese sentido, la empresa viene “trabajando firmemente para un presente y un futuro sustentable”.
“Desarrollamos diferentes proyectos alineados a los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) definidos en 2015 por la Organización de las Naciones Unidas, en el marco de la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible. Una oportunidad para que los países y sus sociedades emprendan un nuevo camino en pos de mejorar la vida“, aseguraron.
Aerolíneas Argentinas
Desafíos sostenibles a largo plazo
“En 2018, Airbus se propuso ser pioneros de una industria aeroespacial sostenible para un mundo más seguro y unido. Si bien es muy ambicioso, sabemos que se puede lograr mediante acciones sostenibles. Por eso, nuestros dos objetivos principales son: explicar, enseñar e inspirar lo que estamos haciendo, ya que es un compromiso fuerte y, por supuesto, si Airbus esta solo en este camino va a ser complicado; y además queremos actuar, mediante la innovación e inversión a nivel energético, gubernamental y académico“, dijo Gressin.
Airbus
Actualmente, todos los aviones y helicópteros de Airbus son capaces de volar con una mezcla de hasta un 50% de SAF. Y, a largo plazo, se ampliaría ese porcentaje. Por eso, el Vicepresidente adelantó: “Nuestro compromiso como fabricante es ir más allá. Queremos llegar a 2030 con aviones, helicópteros y aviones de transporte de carga certificados para el uso de combustibles sostenibles de aviación hasta un 100%“.
“Queremos lograr estas metas tan importantes para nosotros, y especialmente para todo el planeta. Creemos que podemos hacerlo de manera más efectiva y rápida a través de estas accio
Aerolíneas Argentinas y SAF
Aerolíneas Argentinas tiene previsto establecer una agenda integral para acceder al SAF mediante un trabajo conjunto entre organismos estatales y empresas privadas el próximo año, según indicaron fuentes de la compañía. En ese sentido, la empresa viene “trabajando firmemente para un presente y un futuro sustentable”.
“Desarrollamos diferentes proyectos alineados a los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) definidos en 2015 por la Organización de las Naciones Unidas, en el marco de la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible. Una oportunidad para que los países y sus sociedades emprendan un nuevo camino en pos de mejorar la vida“, aseguraron.
Aerolíneas Argentinas
Desafíos sostenibles a largo plazo
“En 2018, Airbus se propuso ser pioneros de una industria aeroespacial sostenible para un mundo más seguro y unido. Si bien es muy ambicioso, sabemos que se puede lograr mediante acciones sostenibles. Por eso, nuestros dos objetivos principales son: explicar, enseñar e inspirar lo que estamos haciendo, ya que es un compromiso fuerte y, por supuesto, si Airbus esta solo en este camino va a ser complicado; y además queremos actuar, mediante la innovación e inversión a nivel energético, gubernamental y académico“, dijo Gressin.
Airbus
Actualmente, todos los aviones y helicópteros de Airbus son capaces de volar con una mezcla de hasta un 50% de SAF. Y, a largo plazo, se ampliaría ese porcentaje. Por eso, el Vicepresidente adelantó: “Nuestro compromiso como fabricante es ir más allá. Queremos llegar a 2030 con aviones, helicópteros y aviones de transporte de carga certificados para el uso de combustibles sostenibles de aviación hasta un 100%“.
“Queremos lograr estas metas tan importantes para nosotros, y especialmente para todo el planeta. Creemos que podemos hacerlo de manera más efectiva y rápida a través de estas acciones”, concluyó Gressin.
nes”, concluyó Gressin.