En un nuevo operativo de fiscalización, la Dirección General de Aduanas detectó un intento de contrabando mediante el sistema de envío simplificado por “courier” de Pufs dentro de los cuales se ocultaban 3.720 atados de cigarrillos de una reconocida marca.
El operativo se concretó en función del “análisis de gestión de riesgo” que viene aplicando el organismo encabezado por Guillermo Michel, uno de los funcionarios del equipo económico más cercano al ministro Sergio Massa. Ese análisis detectó que Australia, adonde se dirigía el envío, es una plaza extremadamente sensible para el contrabando, debido a las diferencias de valuación entre la mercadería en la Argentina y el país oceánico
De hecho, se calcula que el valor de la mercadería secuestrada supera los 2 millones de pesos, por lo cual la multa podría ascender a $40 millones (esto es, hasta 20 veces el valor de lo secuestrado).
Pufs truchos
Los 3.720 atados de cigarrillos estaban ocultos dentro de pufs de madera acolchada y la Aduana calculó su valor en poco más de dos millones de pesos. Según el organismo, Australia es una plaza especialmente sensible para este tipo de maniobras ilícitas, “en vistas del nivel de apreciación de determinadas mercaderías al ingresar en ese mercado”.
Todo sucedió al pasar las encomiendas por escáner. Los inspectores aduaneros advirtieron que los 13 bultos de los supuestos pufs —por los cuales se había declarado un valor total de alrededor de 550 dólares— arrojaban imágenes que no eran compatibles con lo indicado en la documentación presentada.