El Gobierno nacional destinará $70.000 millones para asistir y ayudar a productores agropecuarios afectados por la sequía. Los beneficios serán a través de fondos rotatorios y créditos a tasas subsidiadas que fueron anunciados el último martes dentro de un paquete de medidas para el sector.
Los fondos partirán en mayor medida del Banco Nación, entidad que pondrá a disposición de los agricultores damnificados por la falta de lluvias $50.000 millones en créditos a tasa subsidiada, en la que el Ministerio de Economía se hará cargo de 15 puntos.
De esos 15 puntos, 10 correrán por parte de la Secretaria de Agricultura, Ganadería y Pesca, lo que le demandará una inversión de $10.000 millones, y 5 corresponderán a la Secretaría de Industria y Desarrollo Productivo por $5.000 millones, informó a Télam la cartera agropecuaria. De esta manera, habrá dos líneas de crédito a tasa subsidiada para aquellos productores comprendidos en la emergencia.
Así, el Estado nacional invertirá $70.000 millones en asistencia financiera y créditos subsidiados para el agro, sin tomar en cuenta las medidas que tendrán impacto fiscal anunciadas el martes pasado por el ministro de Economía, Sergio Massa, como lo son la suspensión del pago del anticipo de Ganancias y de los juicios de ejecución fiscal y del embargo de Cuentas Corrientes.
Además, se tendrá en cuenta la venta forzosa de hacienda para el cálculo de impuestos a las Ganancias y la homologación de los pedidos de emergencia en trámite en la Secretaría de Agricultura, entre otros puntos.
Según marcó Massa tras realizar los anuncios en una reunión que mantuvo con los titulares de las entidades integrantes de la Mesa de Enlace y de la Mesa Agroalimentaria, estos beneficios podrían llegar “a un universo de 54.100 productores de la Argentina que de alguna manera van a estar abarcados por estas medidas”.
“Tenemos la responsabilidad de trabajar todos juntos, más allá del pensamiento de cada uno y el rol de cada uno, para tenderles una mano y ayudarlos a superar esta circunstancia climática agravada este último año pero que viene siendo recurrente con un cambio de cronograma climático, por un lado, pero por otro con un fuerte impacto de la sequía en el último año”, agregó el titular del Palacio de Hacienda.
Cómo van a funcionar los créditos y fondos rotatorios para el agro
Según comentó durante la semana la presidenta del Banco Nación, Silvina Batakis, existe “una línea especifica para el sector agropecuario pyme que está vigente y que tiene una tasa promedio del 40,6%”.
Como parte de las medidas, “se van a sostener estas tasas de origen” sin modificarlas, y se otorgará “un año de plazo de gracia para que los productores tengan ese período para recomponer sus ingresos y empiecen a devolver (el crédito) recién el año que viene”.
Otra medida -precisó Batakis- es una línea nueva donde pondrán a disposición $ 20.000 millones a una tasa de interés del 49,5%, y que también posee un año de gracia. Es en estos préstamos donde Agricultura e Industria aportarán $15.000 millones para subsidiar 15 puntos en la tasa.
Al paquete crediticio hay que sumarle los fondos rotatorios por $5.000 millones para llegar a los pequeños productores, que se canalizará a través de convenios con provincias, municipios y/o cooperativas agropecuarias, sistema con el que se aspira a asistir a 18.000 pequeños productores, monto que es aportado de la cartera agropecuaria.
Las consecuencias de la sequía
Argentina enfrenta una de las peores sequías de los últimos tiempos, que se agravó durante el último semestre de 2022, en un contexto donde el fenómeno climático de La Niña se desarrolla por tercera vez consecutiva en el país.
Esto produjo un severo impacto en los cultivos de invierno; según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) la cosecha de trigo cayó 10 millones de toneladas respecto de la campaña pasada hasta las 12,4 millones de toneladas, mientras que se esperan caídas de 7,5 millones de toneladas en maíz y 2,3 millones de toneladas en soja.
Asimismo, generó un fuerte impacto en las economías regionales, sobre todo las que se encuentran en la franja este del país, y también en la ganadería, aunque por el momento es imposible obtener un análisis concreto de las pérdidas.
Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las mermas en los ingresos de los productores de soja, maíz y trigo podrían alcanzar los US$ 10.425 millones por la sequía.
De ese total, se prevé que las pérdidas del sector productivo en hectáreas cosechadas alcance los US$ 8.530 millones, mientras que en hectáreas sembradas y no cosechadas se ubique en US$ 757 millones, y en hectáreas no sembradas por falta de humedad en US$ 1.139 millones.