La artista estadounidense vivió una noche única en su reencuentro con el público argentino. Además felicitó a la gente por la obtención de la Copa del Mundo y prometió volver próximamente con un nuevo disco
Las manos temblaban y alguna que otra lágrima se resbalaba de las mejillas. Con sus rulos salvajes y una sonrisa gigante recibía a cada fan que se acercaba, mientras de su pecho afloraban las velas del barco que tiene tatuado. Nadie podía contener los nervios y la emoción de tener cerca a su ídola. De jean y camisa negra, LP transmitía una paz y una relajación únicas minutos después de haber terminado la prueba de sonido. Faltaban casi 3 horas para el comienzo de su show en el Luna Park, pero la tarde ya era una fiesta.
La artista estadounidense – que compuso para artistas como Rihanna, Cher, Christina Aguilera y los Backstreet Boys– regresaba al país tras su presentación en el Lollapalooza 2022, sin embargo el día tenía un marco especial, era su primer show en solitario luego de cuatro años. En aquel entonces había agotado dos noches en el Teatro Vorterix.
Mientras en los pasillos se escuchaba algún leve y tímido grito de emoción, puertas afuera el frío de un extraño ‘invierno’ caía sobre el verano de Buenos Aires. Envueltos en banderas LGBT, con remeras y buzos de LP, y contra todo pronóstico, cientos de personas esperaban ingresar al estadio para vivir el regreso de la artista. La autora de ‘Lost On You’ llegó al país en el marco de su gira por Sudamérica luego de visitar países como Brasil, Colombia y Ecuador.
Con un talento único, LP hizo vibrar a un Luna Park lleno, en un show que fue una montaña rusa
Con la noche ya avanzada, y el reloj marcando la hora indicada, el Luna Park se veía completo. Desde las gradas hasta el campo -con todos los fans de pie-, no parecía entrar un alma más. Fue entonces cuando el escenario empezó a teñirse de luces rojas y comenzaron a sonar los primeros acordes de ‘When we touch’.
De saco blanco y desde lo alto del escenario saludaba a la gente en una especie de emotivo reencuentro. A partir de entonces, dueña de una voz única, melódica pero a la vez áspera, LP pasaba de un rock pesado a sonidos casi de ópera. Cambiante y dinámico, atravesando un clima y otro, el show incluyó temas como “The One That You Love”, “How Low Can You Go”, “One Last Time” y “Goodbye”.
Pero más allá de la música, la noche también dio lugar a momentos de ‘conexión’ con el público. “Argentina, campeones del mundo. Felicitaciones. ¿Quién es el campeón del mundo? Ustedes. Estoy muy feliz y orgullosa de ustedes. Y agradecida de que estén aquí con nosotros esta noche. Me gustaría tomar un trago con cada uno de ustedes”, expresó la artista felicitando a la gente por el título obtenido por la Selección nacional en la última Copa del Mundo. A lo que el público le devolvió un ‘Olé, olé olé, olé, LP, LP, LP’, que ella inmediatamente respondió con un: “Argentina, Argentina, Argentina, Argentina, los amo”.
La artista neoyorquina LP volvió a deslumbrar a sus fans argentinos con una performance electrizante en el Estadio Luna Park
Y tal cómo había anticipado en diálogo con Infobae, la noche estaría marcada por gran parte de su último álbum Churches. Por eso, segundos antes de interpretar la canción que da nombre a este disco afirmó: “Que asombroso. La única forma en la que puedo describir y decir esto es ‘muchas gracias’. Esta canción es sobre el amor por ustedes, saben que no importa lo que creamos. Todo es sobre el amor. Gracias por mostrarme mucho amor. Esto es ‘Churches’, tal como ustedes lo son para mí, mis ‘Churches’.
De esta manera, la artista brindó una noche especial repasando grandes éxitos de su carrera y de todos sus discos, hasta el momento tiene 6 editados. Sin embargo, tal como expresó durante el show, ya trabaja en un nuevo material que ansía mostrar y con el cual le encantaría regresar a la Argentina.
Y como no podía ser de otra manera, LP cerró la noche con su más grande éxito, el cual la catapultó a la fama. Entre gritos, la gente pedía a coro por ‘Lost On You’, por eso, en cuanto empezaron a sonar los primeros acordes, todo ‘explotó’. Con sus teléfonos en el aire, nadie quería perderse de retratar el momento. Para darle un tono aún más único a la noche, la cantante bajó del escenario y cerró el show firmando autógrafos en cartulinas, papeles e incluso brazos, los cuales seguro se convertirán en tatuajes que retratarán el instante para siempre.