El primer eliminado volvió a la casa y aprovechó para despejar la duda de todos los televidentes.
Además de conocerse este domingo a los tres finalistas de la edición 2022 de Gran Hermano, este lunes se dieron los tres ingresos a la casa de los exparticipantes Tomás Holder, Mora y Martina para sumarle sorpresas a los jugadores.
Durante la gala de eliminación, el conductor Santiago del Moro había adelantado que entrarían tres exjugadores a la casa, con el objetivo de juntar votos positivos para Nacho, Marcos y Julieta, los tres finalistas. El que entró con todo, fiel a su estilo, fue Holder.
En contraposición de personalidades, al rosarino le tocó hacer campaña para Marcos, quien lo recibió con los brazos abiertos. En un intento de conocerse mejor, ya que solo compartieron una semana, los chicos entablaron una conversación profunda en la habitación.
En un momento dado, Holder lo interrogó para saber si le había gustado alguna persona dentro de la casa e indagó sobre cómo se sintió el salteño durante “cinco meses sin nada”, en referencia al sexo.
“Yo no hubiese aguantado, Marcos. Yo me hubiese ido. Si al segundo mes no tenía contacto con nadie, no sé”, lanzó Holder a la espera de la respuesta de su aliado.
El Primo respondió: “No me desespero por nada… No necesito tampoco, digamos. No lo tomo como una desesperación ni mucho menos”. Acto seguido, Tomás trajo el nombre de Julieta Poggio a la charla.
“Yo te veía pegado con Juli y después dijo ‘no, tiene novio'”, lanzó el tiktoker. “No, no… Aparte… No, no. Súper amiga”, respondió Marcos que celebró las relaciones que formó en la casa.