Producto de los efectos de la peor sequía en 100 años, la liquidación de dólares por parte del sector agroexportador se derrumbó un 80%. Según datos del Banco Central (BCRA), el ingreso de divisas fue menor a los US$ 700 millones, lo cual debilitó la posición de las reservas y motivó el cambio de metas de acumulación con el FMI.
Según el informe de Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario del BCRA, el “Sector Privado no Financiero” fue comprador neto de moneda extranjera por US$ 2.053 millones en el mercado de cambios. Dentro de ese grupo, el principal sector en términos de ventas netas, “Oleaginosas y cereales”, registró ingresos netos por US$ 689 millones, un 81% menos que en el mismo mes de 2022. Esta caída interanual se explicó “principalmente por la fuerte sequía que afecta gravemente a la producción agrícola de los principales productos de exportación”.
El “Sector Real excluyendo Oleaginosas y Cereales” fue comprador neto de divisas por un total de US$ 2.118 millones, lo cual representó una reducción interanual del 16%. Estas compras fueron destinadas principalmente a realizar pagos netos de importaciones de bienes por US$ 1.277 millones, de servicios e intereses por US$ 549 millones y a gastos de pasajes por US$ 166 millones, remarcó el documento oficial.
“La actividad económica global siguió desacelerándose en los últimos meses y los pronósticos de crecimiento mundial continuaron reduciéndose. Este panorama se dio en un escenario en el que la persistencia de la alta inflación condujo a los bancos centrales de las económicas avanzadas a implementar el mayor ciclo de política monetaria contractiva desde la crisis financiera global de 2008/09”, analizó el Central. Si bien las condiciones financieras para los países en desarrollo “mejoraron en el margen, aún prevalece un entorno mayormente adverso de elevadas tasas de interés y salidas netas de capital”, añadió el BCRA.
Balance cambiario
En marzo, los clientes de las entidades compraron US$ 2.138 millones en el mercado de cambios, y las entidades compraron US$ 49 millones, de los cuales el BCRA vendió US$ 2.070 millones en el mercado y efectuó pagos netos a través del Sistema de Pagos de Moneda Local por US$ 117 millones.
Las “Personas humanas” compraron de forma neta US$ 457 millones, con una caída interanual del 20%, principalmente para gastos efectuados con tarjetas por consumos con proveedores no residentes (con un neto de US$ 281 millones) y para atesoramiento (con un neto de US$ 132 millones por compras de billetes).
La cuenta corriente cambiaria, que comprende los flujos netos por exportaciones netas de bienes y servicios e ingreso primario y secundario, registró un déficit de US$ 2.020 millones. Este resultado fue explicado por egresos netos de las cuentas de “Servicios”, “Bienes” e “Ingreso primario” por US$ 866 millones, US$ 747 millones y US$ 432 millones, respectivamente, parcialmente compensado por los ingresos netos de transferencias por “Ingreso secundario” US$ 25 millones.
En tanto, la cuenta financiera del “Sector Privado No Financiero” tuvo un déficit de US$ 675 millones en marzo, destacándose los registros de operaciones de canje por transferencias con el exterior por US$ 386 millones (en gran parte explicados por el registro de la contrapartida de los ingresos en concepto de viajes y pasajes sin obligación de liquidación en el mercado de cambios), los registros por las cancelaciones de saldos en moneda extranjera con entidades locales por el uso de tarjetas con proveedores no residentes por US$ 290 millones, los pagos de préstamos a organismos internacionales y otros por US$ 41 millones y la formación de activos externos por US$ 4 millones.
Por su parte, las operaciones de la cuenta financiera cambiaria del Gobierno y BCRA resultaron superavitarias en US$ 2.815 millones, explicado principalmente por desembolsos netos, los pagos de intereses y comisiones al Fondo Monetario Internacional por US$ 2.619 millones y el ingreso neto de deuda financiera de otros organismos internacionales por US$ 362 millones, movimientos parcialmente compensados por la cancelación de préstamos financieros por US4 197 millones y registros por la contrapartida de ingresos por operaciones de canje con el exterior por US$ 51 millones.