Yevgeny Prigozhin encabezó un motín abortado contra el ejército y el Ministerio de Defensa de Rusia.
Un avión vinculado al jefe mercenario ruso Yevgeny Prigozhin llegó a Bielorrusia desde Rusia este martes, y se cree que lo llevaría al exilio tres días después de que encabezó un motín abortado contra el ejército ruso.
La agencia de noticias estatal RIA de Rusia informó que las autoridades habían abandonado un caso penal contra el grupo Wagner de Prigozhin luego del motín abortado durante el fin de semana, que desafió el manejo militar de la guerra en Ucrania.
Con el presidente ruso, Vladimir Putin, intentando reafirmar su autoridad tras el motín, el Kremlin informó que el mandatario se dirigiría más tarde este martes a los miembros de las unidades militares rusas, la Guardia Nacional, las fuerzas de seguridad y otros que ayudaron a mantener el orden durante la revuelta.
Una crisis que se saldaría sin procesos judiciales
Según un acuerdo alcanzado el sábado por la noche que calmó la crisis, el Kremlin aclaró que los combatientes que participaron en el motín no serían procesados.
Prigozhin había dicho que iría a la vecina Bielorrusia por invitación de su presidente, Alexander Lukashenko. Pero los detalles de su viaje propuesto al exilio no se hicieron públicos.
El sitio web del servicio de seguimiento de vuelos Flightradar24 mostró un avión Embraer Legacy 600, con códigos de identificación que coinciden con un avión vinculado a Prigozhin en documentos de sanciones estadounidenses, descendiendo a una altitud de aterrizaje cerca de la capital de Bielorrusia, Minsk.
Apareció por primera vez en el sitio de rastreo sobre Rostov, la ciudad del sur de Rusia que los combatientes de Prigozhin capturaron el sábado pero no hubo confirmación inmediata de si Prigozhin estaba a bordo.
Fue visto por última vez en público el sábado por la noche, sonriendo y saludando a los transeúntes mientras salía de Rostov en la parte trasera de un todoterreno después de ordenar a sus hombres que se retiraran.
Putin aseguró en un discurso el lunes por la noche que los líderes del motín habían traicionado a su patria, aunque no mencionó a Prigozhin por su nombre.
“A los combatientes de Wagner se les permitiría establecerse en Bielorrusia, unirse al ejército ruso o irse a casa”, comentó.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, reveló el martes en una conferencia de prensa regular que se estaba implementando el acuerdo para poner fin al motín, pero aceptó que no tenía información sobre dónde estaba Prigozhin.
También expresó que no sabía cuántos combatientes de Wagner firmarían contratos con el Ministerio de Defensa.
Descartó la idea de que el control del poder de Putin se había visto afectado por el motín y calificó esos pensamientos de “histeria”.