Al menos cinco personas, incluyendo un chico, murieron al estrellarse un avión en una zona residencial en el estado brasileño de San Pablo, tal como informaron las autoridades este sábado.
Los bomberos no detallaron si todas las víctimas viajaban en la aeronave, que era “de pequeño porte”. La avioneta cayó en la mañana del sábado en una plaza arbolada rodeada de casas en la localidad de Jaboticabal.
Según confirmaron las autoridades del lugar, la nave tenía todos los papeles en regla pero, de un momento a otro, se precipitó desde el cielo e impactó contra el suelo. A continuación, se desató un incendio que dejó a los tripulantes y pasajeros “carbonizados”.
Investigan si hubo sobrepeso a bordo
La investigación para esclarecer las circunstancias del accidente ya comenzó y se evalúa una posible causa de la tragedia: la nave tenía capacidad para un piloto y tres pasajeros pero llevaba a una persona más, superando la capacidad máxima permitida de la avioneta.
Entre las víctimas, la Policía identificó a Decides Menezes Tiago, un conocido empresario de la región de Monte Alto, dueño de una óptica y propietario y piloto de la nave. Thiago da Ótica, como le decían en la zona, había salido hacia Fernandópolis para buscar a unos amigos y llevarlos a pasear en avión, confirmó su hija Tiele al medio local Globo.
La última información indica que la Policía convocó al personal del órgano regional del Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos, el Cuarto Servicio Regional de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (SERIPA IV), con sede en San Pablo, para que lleven a cabo la pericia sobre el siniestro de la aeronave.