SENASA confirmó 31 casos de Encefalitis Equina en La Pampa

Un total de 31 casos de brotes de encefalitis equina han sido identificados en la provincia de La Pampa, según el informe más reciente del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa). Hasta el día de ayer, se habían registrado 24 casos, pero en las últimas horas se confirmaron siete casos adicionales. La mayoría […]

Un total de 31 casos de brotes de encefalitis equina han sido identificados en la provincia de La Pampa, según el informe más reciente del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).

Hasta el día de ayer, se habían registrado 24 casos, pero en las últimas horas se confirmaron siete casos adicionales. La mayoría de los casos se concentra en la región noroeste de La Pampa, abarcando localidades como General Pico, Colonia Barón, Trilí y Bernardo Larroudé. En otras zonas de la provincia, solo se han reportado casos en General Acha y 25 de Mayo.

De acuerdo con el Senasa, La Pampa se sitúa en el sexto lugar a nivel nacional en términos de la cantidad de casos, ubicándose por debajo de provincias como Buenos Aires (760), Santa Fe (181), Córdoba (155), Entre Ríos (70) y Corrientes (63). La situación actual representa un aumento significativo en comparación con los reportes anteriores, evidenciando la necesidad de medidas preventivas y de control en la región.

La encefalitis equina del oeste es una enfermedad causada por un virus que se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados que actúan como vectores, principalmente en áreas rurales. Por esa razón, es fundamental continuar las tareas para evitar la proliferación del mosquito Aedes albifasciatus infectado, transmisor de la enfermedad; el uso de repelentes, para evitar picaduras, y extremar las precauciones en caso de viajar a otras provincias en donde ya se han registrado casos en equinos.

Prevención

Zoonosis consideró “fundamental el saneamiento ambiental de los predios donde se alojan caballos y personas asociadas a dicha actividad”. En este sentido difundieron una serie de medidas:

  • El drenaje o rellenado de espacios de anegación temporaria que puedan servir como sitio de oviposición para las hembras de esta especie.
  • Desmalezado del peridomicilio y predios verdes para disminuir la presencia de mosquitos adultos.
  • La protección de las personas que trabajan o viven en las inmediaciones del lugar donde se aloja el caballo enfermo:
  • Uso de ropa de trabajo clara y de manga larga.
  • Utilización de espirales en el exterior y pastillas o aerosoles en el interior de las edificaciones.

          * Aplicación periódica de repelentes de insectos
          * Colocación de telas mosquiteras en puertas y ventanas de recintos de animales y viviendas.

  • En relación al uso de insecticidas, la fumigación sólo es posible como una medida de control en los alrededores del establecimiento o en espacios verdes de centros urbanos donde se alojen los equinos enfermos.

Ante cualquier duda las personas deben consultar a los establecimientos de salud y por los animales hacer la notificación correspondiente a SENASA.