Se trata de Ramiro Pigliapoco, quién hasta fines de diciembre fue titular del área de Tecnología de Comunicación e Información del Enargas.
El nuevo interventor del Enargas, Carlos Casares, ordenó una investigación interna tras hallardos servidores informáticos de alta potenciainstalados en lasala de sistemas de la sede del organismo que no estaban declarados en el inventario, con lo cual se supone eran usados para fines ajenos a los del Enargas.
Se supone que los mismos eran utilizados para minar criptomonedas y por ello se inició la investigación interna.
Por ello la investigación apunta a Ramiro Pigliapoco, quién hasta fines de diciembre fue titular del área de Tecnología de Comunicación e Información del Enargas.
Según se constató, las computadoras no estaban incluidas en el inventario del ente regulador ni tampoco brindaban ningún tipo de servicio asociado al contralor de la actividad gasífera.
“Esta intervención tomó conocimiento de la existencia en el ámbito de la Gerencia de Tecnologías de la Información y Comunicación de la presencia de dos equipos no inventariados, que prima facie no guardan relación con las funciones del organismo y que habrían sido utilizados para intereses ajenos a la competencia del Enargas”, detalla Casares en la resolución 6/2024 que tiene fecha del 6 de enero.
A su vez, el ente dispuso la creación de una comisión investigadora, a cargo de Claudio De la Fuente, un directivo histórico del área de Recursos Humanos, y de Silvana Onorati, coordinadora del Asuntos Legales del organismo. Pero, un día antes de su oficialización, Pigliapoco presentó su renuncia, lo que evitó que se lo indague en profundidad para saber cómo dos servidores de alta tecnología llegaron a estar instalados dentro del organismo.
La sospecha sobre el ex gerente de Tecnología surge porque era uno de los pocos que tenía autorización para ingresar a la sala, cuyo acceso requiere una validación mediante huella digital en la puerta de entrada.
Los investigadores deberán determinar, en primer lugar, quién es el propietario de los equipos y luego probar que los servidores eran destinados al minado de criptomonedas. Para ello, se requerirá la pericia de expertos informáticos que deberán auditarlos en detalle. También deberá constatarse si el consumo energético del edificio aumentó considerablemente, como variable a tener en cuenta.
Si el avance de la investigación arroja pruebas concluyentes, las nuevas autoridades del Enargas llevarán el pedido a la Justicia.
Antecedentes
Pigliapoco ingresó al Enargas durante la intervención a cargo de Federico Bernal, que llegó al ente en marzo de 2020 con el respaldo de la exvicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Luego, Bernal dejó su cargo en el ente regulador en octubre de 2021 y fue reemplazado por Osvaldo Pitrau.
El departamento de Seguridad Informática ya había estado en el ojo de la tormenta en septiembre pasado por la filtración de una base de datos del organismo que se vendió en la red oscura de Internet.
Disconforme con las explicaciones técnicas que recibió de Pigliapoco, Pitrau había contratado una auditoría externa a cargo del área de Ciberseguridad de la Universidad Scalabrini Ortiz (ONSO), que depende de Pablo Lázaro, quien fuera subsecretario de esa unidad en el organismo durante la gestión de Patricia Bullrich en el gobierno de Cambiemos. Los resultados de esa investigación se conocerán en las próximas semanas.
Pitrau dejó el Enargas a fines de diciembre, reemplazado por Casares. Una de sus últimas medidas fue disolver la gerencia de Innovación Tecnológica. El área en cuestión fue una de las que más creció durante la gestión de Bernal: elevó exponencialmente el personal de planta del ente regulador, que hoy supera las 650 personas, un 30% más que la media histórica.
Casares, que el lunes presidió la audiencia pública del gas para aumentar las tarifas residenciales, apunta a regularizar esa situación a lo largo de 2024.