Alirio Uribe, representante de la Cámara de Colombia, declaró que los escoltas de la senadora intentaron reanimarla tras el infarto y luego la llevaron a la clínica.
La senadora de Colombia, Piedad Córdoba murió producto de un infarto, a los 68 años. La política fue declarada sin vida al ingresar a la clínica Conquistadores en Medellín. La legisladora del Pacto Histórico estaba a punto de celebrar su cumpleaños el 25 de enero.
Mediante un comunicado, la clínica Conquistadores explicó que Piedad Córdoba ingresó a sus instalaciones sobre las 00.50 del sábado sin signos vitales, ”con signos de livideces hipoperfundida”, por lo que fue llevada ”directamente a la sala de reanimación donde se le realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar sin respuesta”, motivo por el cual fue declarada como paciente fallecida y se puso el cuerpo a disposición del Instituto de Medicina Legal.
Alirio Uribe, representante de la Cámara, declaró que los escoltas de la senadora intentaron reanimarla tras el infarto, para luego llevarla a la clínica: ”Entiendo que estaba con uno de sus escoltas y tuvo un infarto fulminante, trataron de reanimarla y finalmente la llevaron al hospital donde ya llegó sin signos vitales”, en diálogo con RCN Radio.
La publicación de Cristina Fernández de Kirchner tras la muerte de Piedad Córdoba
La ex presidenta de la Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, realizó una publicación en X (antes Twitter), donde lamentó la muerte de Piedad Córdoba.
“Nuestro adiós a la senadora Piedad Córdoba, dirigente política latinoamericana comprometida con la paz de su amada Colombia. Querida amiga, si hay alguien que merece descansar sos vos. Te lo has ganado”, escribió la ex mandataria argentina.
Quién era Piedad Córdoba
Piedad Córdoba nació el 25 de enero de 1955 en Medellín, Colombia, y comenzó su carrera en los años 80, cuando ingresó a la administración pública de Medellín. Luego, vivió una larga trayectoria en el Congreso de Colombia hasta ser destituida en el 2010. Años después, en 2016, la decisión fue anulada.
Su papel político empezó bajo las órdenes del líder liberal William Jaramillo, comenzando como subcontralora municipal, y posteriormente Secretaria General durante la alcaldía de Jaramillo. En 1988, fue elegida edil, y un año después se convirtió en concejal. Antes de llegar al Senado en 1994, también fue elegida a la Cámara por la facción jaramillista.
Tuvo cuatro reelecciones, y pasó a ser la presidente del Partido Liberal Colombiano, en 2003. Colaboró en la negociación del acuerdo humanitario con las Farc en 2007, cuando comenzó a relacionarse con el presidente venezolano Hugo Chávez, cercanía que le valió una posterior acusación de colaboración con guerrilleros, que causó su destitución y prohibición de ejercer cargos públicos por 18 años.
Luego de la anulación de la la misma, Córdoba retornó a la política, pero su presencia fue irregular ya que tuvo distintos problemas de salud y se sumaron nuevas acusaciones relacionadas con Alex Saab y las actividades delictivas de su hermano, Álvaro Córdoba, en Estados Unidos, quien reconoció su culpabilidad en delitos de narcotráfico.