Jonatan Maidana decidió ponerle fin a su carrera como futbolista profesional este viernes, luego de su salida de River a fines del año pasado y así le puso fin a una trayectoria en la que, siempre en voz baja pero con liderazgo, se convirtió en un emblema del Millonario, en el que atravesó momentos muy difíciles y también la etapa más exitosa de la institución, y hasta es uno de los jugadores más ganadores que vistieron la Banda, con 16 vueltas olímpicas.
El zaguero llegó a Núñez en 2010 sin generar mucho ruido. Había estado seis meses a préstamo en Banfield desde el Dinamo de Kiev de Ucrania y la principal referencia para el futbolero promedio era que había jugado en Boca, con el que levantó la Copa Libertadores, Recopa y la Sudamericana.
Su debut fue inmejorable: el 16 de noviembre de 2010 con Ángel Cappa como entrenador cuando convirtió un tanto de cabeza en el Superclásico ante el Xeneize, en un empate 1-1. Pero en 2011 llegó el descenso. El defensor, que tiene un hermano fanático del club, decidió quedarse y fue clave para el regreso al año siguiente.
Luego fue el momento de sonreír. Con Ramón Díaz como técnico consiguió el Torneo Final 2014 y la Copa Campeonato de ese mismo año. Mientras que tras el arribo de Marcelo Gallardo, no paró de levantar títulos: dos Copas Libertadores (2015 y 2018), dos Copa Argentina (2016 y 2017), dos Supercopas Argentinas (2017 y 2019), una Copa Sudamericana (2014), dos Recopa Sudamericana (2014 y 2016) y la Suruga Bank (2015).
Durante esos años, Maidana fue emblema y patrón de la defensa. Un capitán que para afuera hablaba poco y nada, pero adentro era una voz jamás ignorada. En 2019 se marchó para tener una experiencia con el Toluca de México pero en 2021 volvió a cerrar su etapa, con un protagonismo más testimonial, en la entidad rojiblanca en la que jugó 319 partidos y anotó nueve tantos.