Rosario Central recibió a Newell’s Old Boys en la décima fecha del Torneo de la Liga y se quedó con el clásico por 1-0 gracias a un gol de Facundo Mallo en el tramo final del compromiso.
No fue un gran clásico. De hecho, prácticamente no hubo situaciones claras de gol ni intervenciones fundamentales de los arqueros. Ni Central ni Newell’s mostraron buen nivel en el clásico, pero este tipo de partidos se define por detalles, que en la tarde rosarina estuvieron del lado del Canalla.
Newell’s logró romper el cero durante el complemento con un gol en contra de Ibarra. Sin embargo, el VAR logró detectar una posición adelantada de Martino en la jugada previa y rectificó, manteniendo el 0-0 en Arroyito.
Cuando restaban poco más de 15 minutos, el propio Martino vio la tarjeta roja por una dura entrada que le valió la expulsión de manera directa, sin mediación.
A partir de allí, Rosario se envalentonó y consiguió el único gol del clásico.
Desde un tiro libre, ejecutado con el exquisito pie zurdo de Malcorra, llegó la apertura del marcador. El ’10’, que entró desde el banco, remató con calidad por encima de la barrera y exigió a Macagno por única vez en toda la tarde.
El arquero voló, llegó a desviar el disparo pero la bola quedó viva dentro del área. Allí, el uruguayo Facundo Mallo no perdonó: le pegó de volea y fulminó al arquero de Newell’s con un remate imposible de contener para desatar la algarabía del público canalla.
Luego del gol, no hubo tiempo para más. Rosario Central festejó una victoria más en el clásico, profundizó la mala situación deportiva de la Lepra y escaló a los 12 puntos en el campeonato.