La bronquiolitis es una enfermedad aguda muy frecuente en la infancia que afecta a niñas y niños menores de dos años. Se presenta principalmente desde el otoño a la primavera, siendo su mayor frecuencia durante los meses de invierno.
En referencia a este tema Ana Bertone; directora general de epidemiología, señaló que la bronquiolitis es una enfermedad viral “que afecta las vías respiratorias altas e inferiores. Comienza como un resfrío común, evoluciona con tos y en ocasiones, grados variables de dificultad para respirar.
Los bebés manifiestan dificultad para alimentarse y para dormir, la fiebre puede estar presente pero no es un síntoma principal en estos cuadros. La gran mayoría reciben tratamiento ambulatorio que consiste en mantener a la niña o el niño hidratado, con confort de temperatura, uso de antitérmicos si tiene fiebre, mantener las vías respiratorias superiores (nariz) sin secreciones, en algunos casos se usan aerosoles (paff con aerocámaras) o intervenciones en salas especiales de oxigenoterapia, como la que cuenta el “Favaloro” y otros centros de Salud de la Provincia”.
El control periódico, el seguimiento diario, con el médico de cabecera es fundamental siempre. “No requiere tratamiento antibiótico ya que es una enfermedad viral, este solo será requerido en excepcionales ocasiones. La evolución de la enfermedad es de aproximadamente 7 a 10 días. Como siempre digo, hay enfermos y no enfermedades, es decir cada niño es diferente y evolucionará de acuerdo a sus condiciones” dijo la funcionaria.
Más adelante reconoció que “hay algunos niños que presentan episodios de hiperreactividad bronquial por un periodo de tiempo más allá de haber superado el cuadro agudo de la enfermedad”.
Respecto al tratamiento de las enfermedades reiteró la necesidad de “no automedicarse, existe una preocupación mundial por la resistencia antimicrobiana, es decir, por la resistencia que los gérmenes presentan frente a los antibióticos, es por ello que hay que usar los antibióticos responsablemente, cuando realmente se considera necesario, no solo por eventuales dudas. Es muy importante que la gente no lo haga”.
En el mismo sentido es que Bertone recordó los síntomas de bronquiolitis y las medidas de prevención a tener en cuenta en especial en esta época de fríos extremos “en presencia de bajas temperaturas siempre circulan más virus respiratorios por eso siempre es importante reforzar las medidas de prevención. El Virus Sincicial Respiratorio es la causa principal de infecciones respiratorias agudas bajas en la infancia y en particular en lactantes menores a dos años. Las bronquiolitis más graves que suelen ser las menos frecuentes, requieren hospitalización”.
En contraposición, y en la mayoría de los casos, apuntó, “la enfermedad se puede tratar con cuidados simples indicados por él profesional de cabecera, atendiendo a las pautas de alarma, las cuales tienen que ver con; observar si aumentan los síntomas respiratorios (que se incremente la tos, que respire más rápido, silbidos en el pecho, que se hundan las costillas al respirar), decaimiento o irritabilidad, que los niños duerman más de lo habitual, que no se alimente bien o rechacen el alimento, que la fiebre sea excesiva, que sean bebés menores de 6 meses entre otras. La consulta ante los síntomas siempre debe realizarse oportunamente”.
Y agregó “siempre es importante completar el esquema de vacunación en general y antigripal en particular ( a partir de 6 meses), procurar la lactancia materna; no medicarlos sin consultar con un profesional, acostar a los bebés boca arriba, evitar el abrigo excesivo y el uso de frazadas o mantas que lo puedan sofocar, evitar llevar a los bebés a lugares cerrados con mucha gente, insistir con el lavado frecuente de manos de adultos y niños, evitar humo de cigarrillo en los hogares, tener cuidado con la calefacción de los mismos, siempre tener ventilados los ambientes “.
Vacuna
Como parte del Calendario Nacional de Vacunación, a partir de este año se comenzó a aplicar a mujeres embarazadas entre las semanas 32 y 36 de gestación, una dosis de vacuna contra el virus sincicial respiratorio, con el objetivo de proteger contra infecciones respiratorias, como la bronquiolitis, a los bebés durante los primeros seis meses de vida.
Al respecto la directora general de Epidemiología concluyó señalando que con esta estrategia de vacunación para personas gestantes “se busca proporcionar a través del pasaje transplacentario de anticuerpos, protección contra la bronquiolitis durante los primeros seis meses de vida, que es el momento de mayor vulnerabilidad para padecer cuadros severos por la infección por este virus.
La vacunación constituye una de las estrategias más importantes de salud pública, ya que responde al análisis de la frecuencia de las enfermedades y a la carga que estas generan en la población. Cada vacuna del calendario es fundamental y aborda un problema significativo de salud pública. Sin lugar a dudas, las vacunas previenen enfermedades y salvan vidas”.