Cómo ahorrar en las tarifas y pagar menos por el gas y la electricidad

Muchos países de América Latina se enfrentan a uno de los inviernos más duros de lo habitual, con temperaturas extremadamente bajas que desafían la comodidad en los hogares. En Argentina, por ejemplo, se vive uno de los inviernos más crudos de la historia, con temperaturas bajo cero en el AMBA, algo que no se registraba desde hace […]

Muchos países de América Latina se enfrentan a uno de los inviernos más duros de lo habitual, con temperaturas extremadamente bajas que desafían la comodidad en los hogares. En Argentina, por ejemplo, se vive uno de los inviernos más crudos de la historia, con temperaturas bajo cero en el AMBA, algo que no se registraba desde hace muchos años.

Por eso el Gobierno lanzó recientemente el Programa de Reconversión y Eficiencia Energética (PRONUREE), un plan que tiene como objetivo principal establecer los niveles máximos de consumo de energía y mínimos de eficiencia para máquinas y artefactos, basados en indicadores técnicos. Ese esquema incluye una la oferta de acceso a financiamiento para el reemplazo de equipos antiguos por otros nuevos, más eficientes en el uso energético.

A la espera de más detalles para la compra con créditos de electrodomésticos más eficientes y ante este panorama, con la suba de tarifas y quita de subsidios, resulta necesario cuidar el bolsillo y el medio ambiente, pero sobre todo el consumo de energía.

En este marco, la Asociación de Distribuidores de Gas (ADIGAS), Edesur y Essen lanzaron tips y recomendaciones para el uso responsable y racional del gas en lo hogares, y en la cocina en particular.

“El gas es el combustible de origen fósil más limpio y menos contaminante. Es un recurso no renovable, razón por la cual se debe velar por su uso eficiente y responsable y cuidarlo entre todos”, remarcaron en ADIGAS.

Cómo ahorra gas si vas a calefaccionar tu casa:

  • Regulá el termostato a una temperatura ambiente de 20ºC en invierno.
  • Calefaccioná sólo aquellos ambientes donde haya gente.
  • No abras ventanas para bajar la temperatura.
  • Utilizá burletes en puertas y ventanas para reducir las infiltraciones de aire.
  • Apagá el piloto del calefactor cuando no lo uses.

Cómo ahorrar gas si vas a usar agua caliente:

  • Usá agua caliente de la canilla sólo cuando sea estrictamente necesario.
  • Hacé lo posible por ducharte en un tiempo razonable, que no supere los 15 minutos.
  • Evitá mezclar agua caliente y agua fría para regular la temperatura; mejor hacelo con el control del artefacto de gas.
  • Usá una ducha con flor que disperse bien el agua.
  • Verificá siempre que las canillas estén cerradas correctamente. No derroches agua.
  • Asegurate de que el piloto del calefón o termotanque esté encendido sólo si lo estás usando.
  • Usá aireadores y reguladores de caudal.
  • Aislá térmicamente las cañerías que conducen agua caliente.
  • Evitá el uso de presurizadores de agua porque generan mayor consumo de agua.

Cómo ahorrar gas en la cocina:

  • Cocinar a fuego moderado. Evitar cocinar a fuego muy alto no solo preserva la calidad de los alimentos, sino que también contribuye al ahorro de gas. Mantener el fuego a un nivel moderado es suficiente para la mayoría de las tareas culinarias.
  • Mantenimiento de quemadores. El polvo, la grasa y los residuos de comida pueden obstruir los orificios del quemador, resultando en un uso ineficiente del gas y una cocción desigual. La limpieza regular de los quemadores es clave para asegurar una distribución uniforme del calor.
  • Cocción eficiente. A la hora de cocinar hay pequeños detalles que marcan la diferencia. Por ejemplo, tapando la olla se puede gastar hasta un 25% menos. Tampoco hay que encender los hornos para “calefaccionar” antes de la cocción.
  • Materiales efectivos. Contar con los materiales adecuados también ayuda a ahorrar. Los productos de aluminio poseen una fuerte conductividad del calor que permiten mantener altas temperaturas a fuego bajo, de esta forma, las preparaciones se siguen cocinando con el calor residual, lo que permite tener las hornallas prendidas por menos tiempo. Este tipo de ahorro es real y está al alcance de todos.