Alberto Melián se impuso por puntos en fallo unánime ante Diego Ruiz en el combate que le dio cierre al evento Gloria y Honor 4 realizado en el Estadio Luna Park. De esta manera el cordobés retuvo los cinturones latino OMB y FIB de la categoría pluma.
Tras un primer round de mucho estudio, llegó en el segundo asalto el inicio de un duelo apasionante de ida y vuelta y con el desenlace abierto. La mayor actividad por parte de Ruiz se veía equilibrada con la mejor defensa y calidad de golpes por parte de Melián que hasta ese momento se mostraba expectante.
En el cuarto asalto ambos boxeadores tiraron y conectaron una gran cantidad de golpes, pero el efecto de este round fue lo que generó una nueva pelea a partir del quinto episodio.
Melián cambió el chip y, como suele hacer en sus combates, arrancó la etapa de cacería: captó el centro del cuadrilátero y fue empujando hacia el encordado a Ruiz que, con menor resto físico también producto de una lesión nasal que traía desde el segundo episodio, ya no dañaba con sus golpes de la misma manera ni lanzaba en cantidad.
A partir del séptimo asalto, el olímpico acentuó su trabajo al cuerpo con la intención de bajar la capacidad aeróbica de Ruíz. El “Profeta” se mantenía activo y en pelea a pesar de ya no contar con la misma energía en el tanque y no daba muestras de querer dejar el resultado en manos de su rival ni de los jurados.
El último round mostró a un Melián muy entero dominando ante un Ruíz que no se resignaba e intentaba equilibrar las acciones para despertar los gritos y aplausos del público presente en el mítico estadio.
Las tarjetas de Roberto Benitez y Hugo Vainesman mientras que Juan Carlos Palmieri vio el combate 98-92 todos en favor de Alberto Melián, que retiene sus cinturones y espera una nueva chance en el exterior para seguir sumando gloria a su carrera profesional de 12-2-1, 7KO. Ruiz que venía de un gran triunfo internacional demostró haber estado a la altura de un combate de fondo en el Luna Park y quedó con un récord de 24-7-1, 12KO.