River Plate no logró romper el cero este miércoles ante Atlético Tucumán como visitante por Copa de la Liga e igualó sin goles, en un partido que le presentó muchas complicaciones desde el inicio y en el que tuvo una chance de oro para sacar ventaja cuando no la pasaba bien, pero que por una decisión de Esequiel Barco terminó malogrando y desatando la bronca de Miguel Borja y Martín Demichelis.
En una jugada que no se condecía en absoluto con lo que ocurría y en la que el Millonario tuvo bastante fortuna, una infracción sobre Nacho Fernández en el área del Decano terminó con un penal a favor, luego de que la ofensiva parecía diluirse.
Los futbolistas de Atlético Tucumán protestaban por una falta previa de Facundo Colidio que no fue cobrada, y Esequiel Barco fue quien se dispuso a ejecutar ante la atenta mirada de Miguel Borja, enojado por no poder ser él el encargado. Pero el remate fue contenido por el arquero Devecchi y le daba otra chance a River de romper el cero en el norte argentino.
Cuando la jugada se revisaba y Demichelis hacía el gesto de ‘9’ con sus manos eligiendo a Borja como ejecutante, Barco decidió ignorar esa decisión y volvió a ejecutar, fallando nuevamente. Esta vez el remate se fue por arriba del travesaño y el DT explotó por la indisciplina de su dirigido, que fue reemplazado en el entretiempo por Franco Mastantuono.
De todas formas, River logró crecer en el segundo tiempo y tuvo varias chances de gol como un remate fulminante de Mastantuono al travesaño, pero su chance ya había pasado. Incluso pudo haberlo perdido porque el Decano también lo intentó y tuvo otro palo que pudo haber torcido la historia. Pero el encuentro se iría sin más.
Con el resultado, igualmente, el Millonario lidera la zona A de la Copa de la Liga apenas un punto por encima de Independiente.