Casper Ruud se clasificó para su primera final del Barcelona Open-Trofeo Conde de Godó, tras derrotar a Tomás Etcheverry por 7-6 (6) y 6-4, en una hora y 57 minutos de juego.
El noruego, que ya había logrado su mejor resultado en el Godó con estas semis, era el único de los semifinalistas que no había perdido ningún set. Y llegará al último partido manteniendo tal condición, aunque el argentino estuvo a punto de evitarlo en el primer parcial.
Y es que el decimotercer cabeza de serie del torneo puso al límite a Ruud, tercer favorito, en un primer set maratoniano que duró hora y cuarto y que se resolvió en el ‘tiebreak’.
Un parcial que se le complicó a la sexta raqueta mundial cuando desperdició dos bolas de rotura para ponerse 5-2 y que se alargó hasta la muerte súbita, porque Ruud malgastó dos bolas de set con 6-5 en el marcador.
A punto estuvo de perder también el desempate, cuando encadenó tres errores no forzados con 5-2 y permitió que Etcheverry volviera a entrar en el partido.
El platense, 30 del ranking mundial, incluso tuvo bola de set con 5-6, pero entonces emergió el mejor Ruud con varios golpes ganadores para llevarse el primer set.
Parecía que el tenista de Oslo encarrilaría rápidamente la segunda manga al quebrar el saque de su adversario en el primer juego, pero el argentino le hizo el ‘contra break’ y volvió a recuperar la iniciativa en el marcador.
Pero a Etcheverry la alegría le duró poco, porque Ruud volvió a romper su saque en el quinto juego para ganar el suyo a continuación y adelantarse por 4-2. En el resto del set se dedicó a minimizar errores y a evitar que su rival conectara golpes ganadores con la derecha hasta el definitivo 6-4.
Casper Ruud espera rival por el título del Godó: Stefanos Tsitsipas o Dusan Lajovic.