“Ha sido muy diferente, he intentado concentrarme en mi juego. es increíble jugar en esta pista”, dijo el italiano.
Jannik Sinner, número dos del mundo, se clasificó el viernes para la cuarta ronda del Abierto de Francia tras imponerse al ruso Pavel Kotov por 6-4, 6-4 y 6-4.
El campeón del Abierto de Australia, vestido con una camiseta de manga larga en otro día frío, sólo tuvo un punto de quiebre en contra en un encuentro desigual.
Kotov, que soñaba con derrotar a un segundo campeón de Grand Slam consecutivo tras eliminar a Stan Wawrinka en la ronda anterior, tuvo un comienzo positivo, pero Sinner se mantuvo a un nivel superior en el primer set.
El italiano logró otro break en el segundo para ponerse dos sets arriba y el mismo patrón se repitió en el tercero, cuando Sinner se hizo con la victoria con un saque directo en el punto de partido y se enfrentará ahora al austriaco Sebastian Ofner o al favorito local Corentin Moutet.
Sinner también venció a Kotov en sets corridos en el Masters de Madrid en abril.
“Ha sido muy diferente, he intentado concentrarme en mi juego. Gracias por el apoyo, es increíble jugar en esta pista”, dijo Sinner en la cancha Philippe Chatrier, donde las gradas se fueron llenando poco a poco después de la hora del almuerzo.
Por su parte, otro italiano, en esta ocasión Matteo Arnaldi, tuvo una actuación sensacional para eliminar al sexto cabeza de serie, Andrey Rublev, y alcanzar los octavos de final.
El jugador de 23 años salvó un punto de set en la manga inicial y acabó doblegando a su excéntrico rival por 7-6(8), 6-2 y 6-4 para igualar su mejor racha en un Grand Slam.
El ruso despotricó y se enfureció consigo mismo cuando el partido empezó a escapársele, golpeando su raqueta contra las piernas y pateando su banquillo mientras se evaporaba otra oportunidad de llegar más lejos en un Grand Slam.
Arnaldi, quien también alcanzó la cuarta ronda del Abierto de Estados Unidos el año pasado, se mostró sólido y apenas falló en una de las mayores victorias de su carrera.
Rublev ha alcanzado 10 cuartos de final de Grand Slam, sin llegar nunca más lejos, pero en esta ocasión ni siquiera pudo alcanzar ese hito, ya que no pudo encontrar respuesta a la precisión y potencia de Arnaldi, que de medirá ahora al vencedor del partido entre el griego Stefanos Tsitsipas y al chino Zhang Zhizhen por un puesto en cuartos.
Swiatek y Gauff pasan sin sobresaltos a octavos de final del Abierto de Francia
La número uno del tenis mundial femenino, Iga Swiatek, celebró el viernes su cumpleaños 23 por todo lo alto con una contundente victoria sobre Marie Bouzkova por 6-4 y 6-2, pasando a octavos de final del Abierto de Francia.
Swiatek sobrevivió a un gran susto en la ronda anterior, cuando salvó un punto de partido contra Naomi Osaka antes de sellar un trabajado triunfo, pero en esta ocasión destrozó el saque de su oponente checa con un tenis de gran precisión.
La polaca, defensora del título en Roland Garros, no mostró signos de resaca tras el partido a tres sets contra Osaka y consolidó un tempranero break para colocarse 3-1 arriba en el set inicial, pero Bouzkova remontó un 5-2 en contra para poner a prueba a su rival.
Sin embargo, Swiatek cambió de marcha y construyó cuidadosamente sus puntos, usando bien los ángulos para hacer correr a Bouzkova de una esquina a otra de la pista Philippe-Chatrier, con un total de 18 golpes ganadores en el primer set.
La primera cabeza de serie del torneo continuó dominando en la segunda manga, convirtiendo sin esfuerzo la defensa en ataque sobre el saque de Bouzkova, colocándose con una ventaja de 4-0 y sentenciando el partido poco después.
Otra de las candidatas al triunfo final en París, la estadounidense Coco Gauff, se impuso a la ucraniana Dayana Yastremska por 6-2 y 6-4, dando un paso más hacia el final de una sequía de tres años en tierra batida.
La ganadora del Abierto de Estados Unidos, que alcanzó la final en París en 2022 y ganó por última vez un título en esta superficie en 2021, se mostró sólida en el primer set contra la sorprendente Yastremska, semifinalista del Abierto de Australia, antes de pasar apuros brevemente en el segundo. Ahora se medirá a la italiana Elisabetta Cocciaretto, número 51 del mundo.
“Jugué contra ella en Madrid y juega muy bien desde atrás”, dijo Gauff, tercera cabeza de serie. “Sabía que sería difícil cerrar el partido. En el último juego, golpeó tres o cuatro pelotas al borde de la línea (…) fue difícil mantener la concentración y no enfadarme demasiado. Pero me alegro de haber podido seguir adelante”.
La ucraniana, número 32 del mundo, en plena escalada en la clasificación después de que su carrera se viera descarrilada por una suspensión provisional por dopaje en 2021 que fue levantada más tarde, se mostró inconsistente con su juego, así como con su saque, acumulando errores no forzados.
La estadounidense sufrió con su primer servicio en la segunda manga, en la que Yastremska logró varios breaks, pero Gauff se mantuvo firme y acabó quedándose con el cotejo.
Ons Jabeur, octava cabeza de serie, continuó con su intento de convertirse en la primera mujer árabe y africana en conquistar un título de Grand Slam con una dura victoria por 6-4 y 7-6 (5) sobre la canadiense Leylah Fernández.
La tunecina, de 29 años, ha estado a punto de alcanzar la gloria en Grand Slams en el pasado, llegando a las dos últimas finales de Wimbledon y a la del Abierto de Estados Unidos en 2022, pero siempre se quedó a las puertas.
El encuentro contra Fernández, ex subcampeona de Flushing Meadows, representaba un reto complicado, y la pareja intercambió breaks en el primer set antes de que Jabeur tomara el control de la contienda con su saque.
A Jabeur no le funcionó mucho su apuesta por las dejadas y pronto se vio 3-1 por detrás en el marcador en el segundo set, pero se llevó los dos juegos siguientes para igualar, antes de salvar un punto de set y completar la victoria en el tie break.
Por su parte, la exfinalista Marketa Vondrousova superó por 6-1 y 6-3 a la francesa Chloé Paquet. La checa, que se convirtió el año pasado en la primera jugadora no preclasificada que gana en Wimbledon, cayó en la final de Roland Garros en 2019.