El mundo de Batman tiene una amplitud inconmensurable. El superhéroe creado en 1938 por Bob Kane y Bill Finger para la editorial de historietas DC Comics tiene una vigencia que no para de crecer. Mientras la nueva película de Batman bate todos los récords, ya se anunció un nuevo título que se estrenará en julio en Estados Unidos. Se trata de “DC Liga de Súper-Mascotas”, donde el enmascarado compartirá cartel con el otro personaje arquetípico, Superman. Y con sus respectivas mascotas, Kripto y Ace, el batisabueso.
Los dibujos animados son una parte esencial para conocer las aventuras que tienen lugar en Ciudad Gótica. Desde los dibujitos para niños de fines de los 60 al universo inaugurado por la serie animada de los 90 llegando a las alocadas interpretaciones más actuales: existe una variedad notable, desde creaciones dedicadas a las infancias a obras para adultos. No faltan los viajes al pasado y al futuro.
Batman y todo lo que lo rodea se reinicia una y otra vez. De esta manera, da lugar a múltiples versiones de este mito moderno. Cada detalle, desde sus infinitos implementos, vehículos y locaciones como su cueva, hasta su compañero de aventuras, Robin, su fiel mayordomo Alfred, o los villanos como Joker, el Pingüino y Gatúbela, aparecen representados una y otra vez.
La prehistoria
Los primeros dibujos animados dedicados al millonario filántropo devenido en anónimo justiciero se basaron en la clásica tira de los 60 que con gran una dosis de humor y estética kitsch fue protagonizada por Adam West como Bruno Díaz (o Bruce Wayne), o sea Batman, y a Burt Ward como Ricardo Tapia (o Dick Grayson), es decir Robin.
Al igual que en la película de las super mascotas recientemente promocionada, Batman compartía cartel con el oriundo de Krypton. Era “The Batman/Superman Hour” (1968), producida por el estudio Filmation. Al año siguiente, presentaron una versión que ya no incluía los segmentos del héroe de la capa roja y que fue rebautizada como “Batman y Robin, el chico maravilla”.
Esta serie daría lugar a “Los Súper Amigos” (1973), producida por Hanna-Barbera, muy popular a principios de la década del 80 en Argentina. Desde el Salón de la Justicia, el hombre murciélago y su fiel ayudante Robin compartían protagonismo con el mencionado Superman, así como con la Mujer Maravilla, Flash, Aquaman, Linterna Verde y Hombre Halcón, entre tantos otros. Todos estos personajes fueron inmortalizados en el álbum de figuritas de Cromy.
En 1977 se presentó “Las nuevas aventuras de Batman“, bastante parecida a la serie del 68 pero con un agregado bastante curioso, proveniente de los cómics: Bat-Mite, una suerte de gnomo enmascarado, con buenas intenciones pero torpe. Es un antecesor de Orco, el personaje de He Man, o de Tontín, el pitufo.
En 2017 se estrenó una película que recuperó fielmente el programa televisivo de los 60: fue “Batman: El regreso de los cruzados enmascarados”, con onomatopeyas incluidas.
La serie de los 90
El éxito de la película live action de 1989, dirigida por Tim Burton y protagonizada por Michael Keaton, revitalizó completamente a Batman y lo puso de moda nuevamente. Por caso, un programa televisivo paradigmático de los 90, Los Simpson, está lleno de referencias a Batman, desde El Barto a la aparición de la voz de Adam West.
Como parte de ese fenómeno, en 1992, Warner Brothers presentó “Batman, la serie animada”, una de las series animadas con más reconocimiento de la historia por la calidad de la animación, del diseño de los personajes y del escenario de Ciudad Gótica, así como por la música y de los actores. Si bien no contiene violencia extrema, aborda temáticas bastante adultas. La banda de sonido fue creada por Danny Elfman, que ya había creado la música de la película de Burton.
En la versión original de la serie animada, se puede apreciar cómo Mark Hammil, el recordado actor que interpreta a Luke Sywalrker en Star Wars, se luce haciendo la voz de Joker.
En esta serie debutó un personaje que creció muchísimo últimamente: se trata de Harley Quinn, que aparecía como la novia maltratada de El Guasón y fue creciendo hasta protagonizar su película con actores y su serie animada. En ambas deja de lado al payaso psicópata maltratador y se afirma en su empoderamiento. La originalidad del personaje, entre otros aspectos, es que nació en el dibujo animado: contrariamente a lo que suele suceder, los cómics vinieron después.
“Batman, la serie animada” tuvo 85 capítulos. Los últimos 15 fueron renombrados como “Las Aventuras de Batman y Robin”. A lo largo de los episodios, aparecen dos de las encarnaciones de Robin. El primero, Dick Grayson se termina transformando en Nightwind, un superhéroe que deja de ser un sidekick (ladero) y toma su propia iniciativa. Es reemplazado por Tim Drake, el tercer huérfano al que Batman cuida y entrena. Este Robin tiene un traje diferente, menos edad y estatura que el anterior.
La serie dio lugar a varias películas. En los cines de Estados Unidos se estrenó “Batman: la máscara del fantasma” (1993), para muchos la mejor película animada del enmascarado. Sin embargo, circuló con más éxito en VHS. La película da una versión del origen del héroe, incluyendo un interés romántico y la aparición del misterioso (o misteriosa) Fantasma, con inspiración en un personaje de los cómics.
Otros filmes basados en este serie fueron “Batman & Mr. Freeze: SubZero“ (1998) y “Batman: el misterio de Batimujer” (2003). Como parte de este universo, presentaron series como ”Superman: The Animated Series” y “Justice League”. Luego vino una nueva serie que seguía la historia: “Las nuevas aventuras de Batman” (1997), con un rediseño de El Joker.
Más adelante, presentaron otras series animadas, rediseñando a los personajes y creando nuevos arcos narrativos, como en “The Batman (2005)”, “Batman: El valiente y el audaz” (2008) y “Cuidado con Batman” (2013), pero ninguna es tan recordada como la de 1992.
Pasado y futuro
La serie animada de los 90 tuvo otra continuidad, que fue “Batman del futuro”, que presenta a Bruce Wayne, el Batman original, como un anciano retirado que ayuda al nuevo Batman, un adolescente problemático llamado Terry McGinnis que se roba el paradigmático traje. Todo sucede en Neo-Gotham City, una megalópolis futurista. Inspirada en la serie, se realizó la película “Batman del futuro: El regreso del Joker” (2000), donde “El Guasón” vuelve de la muerte y en una escena tétrica se apodera de la personalidad del nuevo Robin.
No es el único viaje a otros tiempos. Ya por fuera del universo inaugurado con la serie de los 90, existen obras que colocan en otros tiempos al enmascarado. Como la anteriormente mencionada, también son películas recomendadas para adultos.
La genial “Batman Ninja” (2018), una coproducción nipona-estadounidense que sitúa al hombre murciélago, al chico maravilla y sus archienemigos en el Japón feudal de los samurais. El despliegue visual es impresionante, así como la adaptación que tiene personajes como Joker o Harley Quinn. El anime le sienta muy bien a Batman, algo que se había entrevisto en alguno de los seis cortos que componen “Batman: Gotham Knight”(2008).
En el mismo año se presentó otra del enmarcado situado en otra época: en “Batman: Gotham by Gaslight”, el héroe tiene buscar a Jack el destripador, cuya última víctima es Hiedra venenosa, una huérfana forzada a prostituirse. Aparecen Dickie, Jason y Timmy, encarnación de los tres Robin, huérfanos obligados a robar para un delincuente.
En “Batman vs Dracula” (2005), siguiendo el diseño y la historia de la serie de 2005, también se muestra un viaje en el tiempo y el espacio: es el del popularísimo conde, cuyo cuerpo supuestamente muerto es trasladado de Transilvania a Gótica. El mundo del enmascarado es de una versatilidad asombrosa.