En diálogo exclusivo, la exparticipante de Gran Hermano y el Bailando dio a conocer cómo es su vida tras dejar su tierra natal en búsqueda de nuevos proyectos, y luego de la polémica pelea que tuvo en el certamen
Juliana Díaz supo abrirse paso al mundo del espectáculo tras participar en la edición de Gran Hermano 2022 (Telefe), donde su personalidad y apasionada relación con uno de los jugadores, Maxi Giudici, la destacó ante las cámaras. Si bien no llegó lejos en el reality, esto le abrió las puertas para formar parte del Bailando(América). Su carisma la ayudó en las primeras fases del certamen, pero esto no fue suficiente para ganarse el cariño del jurado y quedó afuera a tan solo semanas de la final del concurso. Su sueño de destacarse en la pantalla chica no se apagó, sino que comenzó a brillar con más intensidad y esto le permitió ser convocada en un programa en Ecuador. Actualmente, en medio de su nueva vida en el exterior, la joven mantuvo diálogo y contó cuáles son sus planes lejos del país, en medio de una polémica que se conoció por una pelea que tuvo en el reality.
“Estoy feliz, juntando dólares, que es lo que pretendo antes de volver a Argentina con todo. Si es que vuelvo….”, expresó a este medio la concursante del ciclo ecuatoriano Soy el mejor, el cual consiste en demostrar las habilidades artísticas de cada uno de los integrantes. Dejando atrás el angustiante episodio que vivió hace días en medio de la nominación del certamen, la muchacha oriunda de Venado Tuerto se refirió a su trabajo: “El reality dura un año, son varios participantes, algunos se suman, mientras que otros los eliminan, por eso dura tanto tiempo. Si todo sale bien, hasta fines de enero voy a estar acá”.
También aprovechó para referirse a su futuro en los medios: “Estaba viendo algunas propuestas laborales que me habían ofrecido en México y Colombia, ya que acá conocí a gente con muchos contactos. Además, estoy viendo que en Argentina no se hacen muchas producciones o realities nuevos”. En alusión al panorama en el que se encuentra la mayoría de sus excompañeros, aseveró: “Estar allá, después de dos años y seguir hablando deGran Hermano o conformarme con un programa de streaming para hablar de exparticipantes no es lo que quiero ni lo que proyecto”.
Juliana, durante su paso por Gran Hermano (Telefe)
Más adelante, Juliana continuó con sus proyectos: “Por algo estudié ocho años de teatro, y estoy formándome con cursos de oratoria, de teatro, entre otras actividades, para afianzarme y abocarme más en la televisión, ficción y producciones. Siento que en Argentina no están haciendo tanto y en otros países me están dando la oportunidad de conocerme y de recibirme”. A su vez, señaló que “como buena sagitariana amo viajar, amo la adrenalina, ir y venir, así que si vuelvo al país será para visitas a la familia, amigos, recargar energías y después, seguramente, regresaré a donde esté”.
Juliana logró destacarse en su nuevo proyecto en Ecuador (Instagram)
Respecto al presunto mal momento que atravesó en la última emisión del programa en el que trabaja, la bailarina destacó que se trató de una “eliminación a uno de nuestros compañeros y me tocó la decisión a mí. Fue agobiante porque no quería cargar con ese peso”. Y para llevar tranquilidad a sus fanáticos, Díaz explicó que estaba muy contenta con este proyecto. “La gente es increíble, en el canal son súper profesionales, me tratan bárbaro y tenemos una muy linda relación con los otros participantes”, aseguró a corazón abierto.
“La gente es increíble”, aseguró Juliana respecto al ámbito laboral donde se encuentra (Instagram)
Cabe recordar que Juliana se volvió viral tras difundirse un clip de su desgarrador llanto en medio del ciclo ecuatoriano. “Hay una realidad y es que hace un par de meses no me vengo sintiendo muy bien, tengo muy lejos a mi familia y la verdad es que decidí autonominarme para irme del show”, comenzó diciendo en ese momento, lo cual trajo las lágrimas de la muchacha a sus ojos. La producción del ciclo le negó esta estrategia y tampoco le dieron tiempo para pensar su decisión, lo cual la dejó con muchas dudas. Luego, terminó nominando a una de sus compañeras, pero la situación la afectó a tal punto que decidió sentarse en la puerta del estudio para sumirse en su tristeza.