La modelo habló luego de haber sido dada de alta en el Hospital Fernández, lugar al que fue trasladada en ambulancia tras sufrir un duro choque
Este viernes por la mañana Julieta Prandi sufrió un fuerte accidente vial y debió ser trasladada de urgencia a un centro de salud. La modelo venía conduciendo su auto y, en la bajada de Av. Sarmiento y Lugones, fue impactada desde atrás.
La información trascendió en A la tarde (América), y los panelistas del programa que conduce Karina Mazzocco aseguraron que su auto “quedó totalmente destruido”. Asimismo, dijeron que tras el accidente, “el personal del SAME la llevó al Hospital Fernández, donde quedó internada de urgencia para practicarle todos los estudios pertinentes”.
“Me chocaron, pero estoy bien”, le dijo la propia Prandi. “Me están volviendo loca. Pasé un día de mier…, recién estoy en casa”, agregó en el breve intercambio que mantuvo con este medio durante la tarde del viernes, ya recuperada del asunto.
Más tarde, y debido al “revuelo” que causó la noticia, la modelo aclaró su situación a través de una historia de Instagram. “Debido a los trascendidos desmedidos, que desconozco cómo llegaron a tanto, quiero aclarar que estoy perfectamente en mi casa. No estoy internada. Sí, me chocaron esta mañana y el SAME, por protocolo, nos llevó a mí y a la otra parte al Fernández para realizarnos controles. Más que nada por la mujer que me chocó que se llevó la peor parte. Muchas Gracias”, escribió.
Debido al “revuelo” que causó la noticia, la modelo aclaró su situación a través de una historia de Instagram
En los últimos meses, y en distintas oportunidades, Prandi contó que su vida se había vuelto un calvario cuando intentó separarse de su expareja y padre de sus hijos, Claudio Contardi. Según ella misma relató, “en febrero de 2019, tomé fuerzas y me fui de mi casa, sin un peso, y decidí rearmar mi vida, buscando un nuevo techo donde poder proteger a mis hijos y a mí misma”. Después de muchas situaciones de violencia y de abuso, Julieta pudo alejarse finalmente de ese pasado tortuoso y mirar hacia adelante.
En ese contexto, conoció a Emanuel Ortega y en octubre de 2020, en plena pandemia de coronavirus, blanqueó su relación con el músico. Desde ese momento, la actriz pudo rearmar de a poco su vida y volver a confiar en el amor de la mano del cantante. “Y un día te das cuenta de que la vida es eso. Un viaje al presente que sólo necesita que estés presente. Gracias Emanuel por darme todo eso”, fue la emotiva dedicatoria que le hizo la modelo al artista al cumplirse un año de su vínculo sentimental.
A comienzos de junio y de invitada a Noche al Dente (América) Prandi abrió su corazón con respecto a los acontecimientos más difíciles de sus últimos años, pero también volvió a mostrarse feliz con su presente. Junto al hijo de Palito Ortega y Evangelina Salazar pudo volver a sentirse plena en una relación de amor. La modelo ahora también es escritora, ya que estos episodios dramáticos que tuvo que atravesar la impulsaron a escribir sobre sus experiencias que reunió en el libro: “Yo tendría que estar muerta”. Allí, la actriz relata, en forma novelada y no autobiográfica, la dura historia de la protagonista, Lucía Caballero, tal el nombre de pila que le hubiera gustado tener y el apellido de su abuela. “Si mi trabajo no me hubiese hecho una persona pública, otro hubiese sido el desenlace. Estaba amenazada, tenía temor y por algo me fui de mi casa”, contó en el momento de la presentación de su primer trabajo.
Emanuel Ortega y Julieta Prandi están juntos desde 2020 (Instagram)
Allí Julieta se sinceró sobre los dramáticos hechos que le tocó superar y también sobre su vínculo con su actual pareja. “Esa mirada de Emanuel hacia mí es la que me sana todos los días”, afirmó con gesto enamorado al referirse a su compañero de vida, mientras desde la producción del ciclo mostraban una foto de ambos juntos, mirándose a los ojos. “¿Cómo es volver a confiar?”, le preguntó el conductor, y Prandi aseguró que es un trabajo arduo. “Una también tiene que trabajar con una misma. No es solamente que el otro te haga sentir confiada, una tiene que trabajar sus propios fantasmas, sus propias sombras”, aseguró al respecto. “Por suerte yo ya había arrancado antes de conocerlo con mi terapia y con mis registros akáshicos, y mis constelaciones, porque hago todo tipo de terapias, pero siento que no es un encuentro, es un reencuentro, que nosotros teníamos que estar juntos, definitivamente”, afirmó con determinación.