Paulo Londra transita por un difícil momento con su ex pareja Rocío Moreno. La madre de sus dos hijas viene reclamando ante la Justicia el dinero correspondiente a la manutención de las menores. Tras las declaraciones que ella – y su madre – realizaron ante los medios de comunicación, el músico cordobés publicó un misterioso mensaje en sus redes sociales: “Es simple, más dinero más problemas, y algunos no tienen nada mejor que hacer que problemas”, disparó Londra, desatando una catarata de especulaciones sobre a quién estaban dedicas esa palabras.
Sin embargo, apareció en escena otra mujer, una joven española llamada Lyna Bekkiche quien respondió el mensaje del cordobés: “Siempre poniendo argumentos y excusas por lo que hacen los demás cuando eso solo es una causa de tu comportamiento inmaduro y mediocre. No cambias”, escribió.
Tras las repercusiones de sus dichos, dio una entrevista a Intrusos (América) y contó más detalles. “Nos conocimos a través de quien era su fotógrafo. Fue en octubre de 2019, en la semana de un concierto que dio en Madrid. Yo tuve intimidad con él la noche antes de irme”, relató la joven.
Después de esa noche, no volvieron a verse. Dos semanas más tarde, Lyna se dio cuenta que estaba embarazada. “Estaba con mi mejor amiga y le dije: ‘Oye, no me vino la regla’. Ahí me acordé y no pensé que estaría embarazada. Era como la última opción. Fui a hacerme el test y dio positivo”, recordó.
Su primera reacción fue contactar a Piero Graziani, uno de los mejores amigos del rapero. “El estaba como enamorado de una amiga mía, que también estaba en la casa en la que nos conocimos con Paulo. Así que le hablé a ella y le dije: ‘Necesito el número de Piero’. Era la única persona con la que podía hablar porque Paulo no me iba a contestar. Hablé con él y me dijo que no se lo iba a decir a Paulo ahora porque eran los Latin Grammy, que esperaría a que volvieran a Argentina. Cuando volvieron, me llamaron los dos”, dijo.
Al momento de comunicarse, Lyna contó que este le ofreció “mandarle dinero para abortar”. “Ni siquiera me preguntó cómo estaba yo, ni cual era mi decisión, ni lo que yo quería. Le dije que ya habían pasado semanas y que me había imaginado el bebé. Yo había decidido tenerlo. Ahí colgaron y una hora después me dijo Piero que ya venía para España”, recordó.
“En ningún momento me habló del bebé ni de Paulo. Me preguntaba por mi, intentando ver mis debilidades, para manipularme. Hasta que los siguientes días le dije: ‘Tu viniste por algo, dime por qué viniste. Estás aquí y no estás haciendo nada’. Cuando lo presioné por el tema, empezó a decirme que debía ir a una clínica para revisarme. Y ahí me dijo que debería ir a un centro de aborto para ver las opciones que había. Y yo le dije que no quería abortar. Y él insistía mucho. Entonces yo le dije que podíamos hacer un papel, un contrato, que dijera que Paulo Londra no es el padre. Porque ellos pensaban que yo quería el bebé porque Paulo es Paulo Londra”, dijo la española.
“Piero estuvo 10 días en Madrid, 24/7 conmigo. Me dijo que yo iba a arruinar la vida de Paulo, que yo estaba arruinando mi vida… Igual fui tonta por creerme cosas así y también abortar por eso, obvio. Fui inmadura en ese momento y me dejé manipular”, reflexionó.
Finalmente, Lyna accedió a practicarse el aborto y contó que lo hizo el día 27 de noviembre de 2019 a las 10 de la mañana. “Salí como a las 12, 1 de la tarde. El aborto lo pagó Piero, aunque supongo que el dinero era de Paulo, no sé. Fuimos a comer a un restaurante y ahí me dijo: ‘Me tengo que ir ya a las 5 que Paulo me consiguió el vuelo’”, describió.