El papa Francisco pidió “poner en discusión el modelo de desarrollo” de una “economía que mata”, al reunirse en la ciudad italiana de Asís con jóvenes de todo el mundo, a los que convocó a construir un proceso de cambio “con los pobres como protagonistas”.
“Hay muchas personas, empresas e instituciones que están haciendo una reconversión ecológica. Debemos continuar por este camino y hacer más. Este ‘más’ lo estás haciendo y pidiendo a todos. El maquillaje no es suficiente, hay que poner en discusión el modelo de desarrollo”, planteó el pontífice en su discurso frente a más de mil participantes del encuentro “Economía de Francisco” que se desarrolla desde el jueves en la ciudad del centro de Italia.
“Se trata de transformar una economía que mata, en una economía de la vida en todas sus dimensiones”, pidió Francisco, en el marco de lo que caracterizó como “un momento difícil: la crisis medioambiental, luego la pandemia y ahora la guerra de Ucrania y las demás guerras que se vienen dando desde hace años en varios países”.
Fue un mensaje con fuerte contenido social y económico. El Papa consideró que “la situación es tal que no podemos solo esperar la próxima cumbre internacional: la tierra arde hoy, y es hoy que debemos cambiar, en todos los niveles”.
“Luego tenemos que aceptar el principio ético universal, que no gusta, de que lo que se daña debe ser reparado: si crecimos abusando del planeta y la atmósfera, hoy debemos aprender también a hacer sacrificios en estilos de vida que todavía son insostenibles”, pidió Jorge Bergoglio, en el que fue el primer encuentro presencial del evento lanzado en 2019 y tras ser recibido al canto de “esta es la juventud del Papa” por parte de los presentes.
“De lo contrario, nuestros hijos y nietos deberán pagar la factura, una factura que será demasiado alta e injusta. Se necesita un cambio rápido y decidido. ¡Cuento con ustedes!”, animó a los participantes de todo el mundo, entre ellos una delegación argentina.
De qué se trata el encuentro “La economía de Francisco”
Es un evento lanzado por el Papa en 2019 que desde el jueves recibió a cerca de un millar de jóvenes economistas, empresarios y agentes de cambio, que junto a Francisco buscan un nuevo modelo económico más inclusivo, humano y que respete la casa común.
Durante tres días, los jóvenes trabajaron en doce grupos en los que trataron los temas de agricultura y justicia; vida y estilos de vida; vocación y beneficio; trabajo y cuidado; gestión y don; finanza y humanidad; políticas para la felicidad; negocios y paz; la economía y la mujer; energía y pobreza; empresas en transición y el C02 de la desigualdad.
Esta semana, el Papa ya había afirmado que el paradigma económico basado en el consumismo “está viviendo su última fase” aventurando que será reemplazado por uno fundado sobre “inclusión, sobriedad, cuidado y bienestar”.