Milicias palestinas lanzaron un ataque masivo contra Israel desde la Franja de Gaza y se registraron numerosas explosiones en varios puntos del país. El grupo terrorista Hamas se adjudicó la autoría de los bombardeos y anunciaron el inicio de una “operación militar”. Según medios locales, los ataques dejaron al menos 6 muertos y 300 heridos.
Las autoridades israelíes denunciaron que terroristas palestinos invadieron su territorio por tierra, aire y mar en la ciudad de Sderot y asesinaron civiles y militares en la zona sur del país. Por su parte, el Comandante en Jefe de las Brigadas Palestinas Al-Qassam, Muhammad Al-Deif, sostuvo: “Todo aquel que tenga un rifle, debería sacarlo, porque llegó el momento”.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, confirmó este sábado el estado de guerra en su primera intervención pública. ”Ciudadanos de Israel, estamos en guerra. No en una operación, no son rondas de combates, es una guerra”, indicó Netanyahu en un video difundido en sus redes sociales.
”El enemigo pagará un precio sin precedentes”, por el “ataque sorpresa criminal”. Además Netanyahu anunció haber ordenado “una extensa movilización” de reservistas.
“El Ejército Israelí declara el estado de alerta de guerra”, declaró un portavoz militar tras el ataque y la infiltración de las milicias palestinas. “Hamas llevó a cabo una operación combinada que incluyó el lanzamiento de cohetes y una infiltración terrorista en el territorio del Estado de Israel”, comunicó el Ejército israelí.
Además, le pidieron a los ciudadanos que permanecieran en sus casas, sobre todo aquellos que se encuentran cerca de la Franja. La advertencia para el resto de la población fue que se mantuvieran en refugios antiaéreos.
Medios israelíes dieron a conocer que varios soldados fueron secuestrados por las milicias palestinas. Por su parte, Yoav Galant, ministro de Defensa de Israel, aprobó una orden para reclutar soldados de reserva ante la emergencia.
“Decidimos poner fin a todos los crímenes de la ocupación de Israel. Su tiempo de arrasar sin rendir cuentas terminó. Anunciamos la Operación diluvio de Al-Aqsa y disparamos, en el primer ataque de 20 minutos, más de 5.000 cohetes”, sostuvieron los terroristas.
El grupo Hamas se comunicó con las autoridades de Líbano y Siria para que se unieran a los ataques contra Israel.