El Congreso peruano aprobó acusar al expresidente Pedro Castillo, destituido y detenido desde el autogolpe de Estado que perpetró en diciembre pasado, por presunta corrupción y lavado de activos, lo que habilita a la Fiscalía a actuar penalmente en su contra.
“Ha sido aprobada la resolución legislativa del Congreso por la que se acusa al señor Pedro Castillo, en su condición de expresidente de la República”, dijo el jefe del Congreso, José Williams, luego de la votación de ayer, con 59 voces a favor, 23 en contra y tres abstenciones.
El documento “declara a lugar la formación de causa penal” contra Castillo por ser “el presunto autor de los delitos de organización criminal agravada, tráfico de influencias y colusión”.
La tesis de la Fiscalía es que el exmandatario dirigía una red de corrupción de lavado de activos y de concesión de contratos de obras públicas integrada por su entorno familiar y político. Los exministros de Transporte, Juan Silva, y de Vivienda, Geiner Alvarado, también fueron señalados por la votación del Congreso.
Durante el debate las bancadas de izquierda defendieron el papel de Castillo, alegando que se lo acusaba en un proceso sin evidencias. El propio Castillo, invitado a comparecer por videoconferencia para ejercer su derecho a la defensa, solicitó que su presentación fuese en persona, lo que fue desestimado por el Parlamento.
El exmandatario se encuentra detenido en una cárcel de Lima desde el 7 de diciembre, acusado de rebelión, luego de intentar disolver el Congreso y gobernar por decreto. Tras ello el Legislativo lo destituyó y designó a Dina Boluarte, vicepresidenta de Castillo, como mandataria.
La salida del poder de Castillo desató una ola de protestas que han dejado al menos 48 muertos por la represión policial. Los manifestantes piden la renuncia de Boluarte -que fue vicepresidenta de Castillo-, el cierre del Congreso, elecciones anticipadas rápidas y una asamblea para redactar una nueva Constitución.
Durante la misma sesión, el Congreso aprobó justamente una propuesta para reabrir el debate de un posible adelanto de elecciones. José Williams dijo que el tema deberá ahora ser analizado por la Comisión de Constitución del Parlamento, que se encargará de confeccionar una nueva propuesta de elecciones anticipadas y acortar el mandato de Boluarte.
El Congreso ya rechazó en cuatro oportunidades el adelanto de elecciones. Una de las últimas propuestas dejada de lado consideraba realizarlas en octubre próximo, para que asuma un nuevo gobierno el 1 de enero del 2024. La misma Boluarte, que fue la vicepresidenta de Castillo, había presentado dos propuestas de adelanto de elecciones para acortar el mandato presidencial que vence en 2026.