Un hombre de 42 años fue detenido en Perú tras ser sorprendido en el interior del baño de mujeres de un colegio y disfrazado de estudiante, para grabar a las alumnas con su celular.
El episodio ocurrió el jueves en la escuela de mujeres “Rosa de América”, ubicado en la ciudad de Huancayo. Según se pudo ver en el video de la detención difundido por la Policía, el hombre, identificado como Walter César Solís Calero, llevaba el uniforme de la institución, una blusa y un sombrero rosa y hasta se había hecho trenzas. Además, escondía su rostro debajo de un barbijo.
El hombre fue descubierto por la subdirectora cuando salía del baño de las menores. La mujer avisó de inmediato al personal administrativo, que lo retuvo hasta la llegada de la policía. Lo arrestaron y trasladaron hasta la comisaría.
“Este hombre permaneció en los baños durante varios minutos. Esto pone en riesgo la integridad física y moral de nuestros estudiantes”, dijo el director de la escuela, Ronald Vilchez.
Intento de linchamiento
Cuando Solís salió de la comisaría para ser trasladado a la Fiscalía, un grupo de padres intentó linchar al hombre, indignados por lo que había hecho.
“Este sujeto estaría inmerso en el delito contra la libertad sexual-actos contra el pudor de menores en grado de tentativa”, indicaron desde la policía.
Por el momento, Solís Calero sigue detenido en la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) de la Policía Nacional y será sometido a pericias psicológicas.
Según medios locales, en su celular se encontraron fotografías con otros uniformes y en otras escuelas. La Fiscalía contra la violencia contra la Mujer de Huancayo investiga si tenía algún antecedente previo y si integra una red internacional de pedofilia al encontrar entre sus pertenencias fotos y videos de estudiantes menores de edad.
“Me gusta tomarme fotografías”, fue lo que habría dicho Walter Solís a la policía, según el diario peruano El Popular.
El Ministerio Público lo acusa del presunto delito contra la libertad sexual-tocamientos, y actos de connotación sexual o libidinosos en grado de tentativa en agravio de menores, delitos por los que podría ser condenado a entre tres y seis años de cárcel.