El juez de audiencia santarroseño, Carlos Besi, condenó hoy a un padrastro a 15 años de prisión, como autor de los delitos de abuso sexual simple de una menor de 13 años, agravado por haber sido cometido contra una menor de 18 años aprovechando la convivencia preexistente, como delito continuado; en concurso real con abuso sexual simple de una menor de 13 años y abuso sexual con acceso carnal, agravado por haber sido cometido contra una menor de 18 años aprovechando la convivencia preexistente, como delito continuado.
Las víctimas fueron dos hijas de la pareja del imputado (46 años) y los hechos se enmarcaron en las leyes 26061 de Protección Integral de los derechos de las niñas, niños y adolescentes y 26485 de Protección Integral a las Mujeres. Además al acusado se le mantuvo la prisión preventiva hasta que el fallo quede firme y/o a la pena sea ejecutable.
Con las pruebas reunidas durante el juicio oral, Besi dio por probado que el padrastro –que fue un padre de crianza de las menores– le realizó tocamientos y roces a una niña, en reiteradas oportunidades, cuando la víctima tenía entre 12 y 13 años; a pesar de que ella lo empujaba para sacárselo de encima.
Además el magistrado acreditó que también, en varias ocasiones, le realizó tocamientos y accedió carnalmente a la otra niña desde los 6 a los 13 años. Las agresiones sexuales se sucedieron hasta tres días antes de formulada la denuncia por una tía de las víctimas.
Todo ello ocurrió en el interior de la vivienda donde el imputado convivía con su pareja y los hijos e hijas de ella, aprovechando los momentos en que la mujer no estaba.
Durante los alegatos de cierre, la fiscala María Cecilia Molinari y la querellante Aldana Belén Prost pidieron la misma pena que finalmente impuso Besi; mientras que el defensor particular, Benjamín Eugenio Ortiz, pidió la absolución por el beneficio de la duda.