En la localidad de Arata avanza la construcción del colegio secundario, que significa una inversión para el Gobierno de la Provincia de casi $200 millones de pesos.
Esta obra es más que significativa para localidad norteña porque aspira a que los jóvenes tengan su propio espacio para completar sus estudios secundarios y no deban ir a otro lugar. Se planteó esta magnífica obra para evitar el desarraigo de los chicos y chicas del pueblo y dar la oportunidad de estudiar en su lugar natal, priorizando el derecho a la educación y calidad de la misma.
El nuevo edificio del colegio secundario en Arata, lo está construyendo la empresa INNOCONST S.A. con un plazo de ejecución de 450 días. El avance de la obra coincide con los tiempos estipulados en los requerimientos y contrató a trabajadores de esa localidad, otro de los objetivos de la obra pública pampeana, generar trabajo genuino en la Provincia para activar las economías locales y regionales.
El edificio se construye en una amplia parcela, donde se dictaban prácticas agrarias del Colegio Agropecuario. En este amplio terreno con espacios verdes crece la obra del nuevo edificio, dejando sectores planificados para recreación y prácticas técnicas.
El nuevo edificio tiene características peculiares en su diseño que potencian su funcionabilidad, cada uno de los espacios tiene relación con las necesidades de los alumnos, alumnas, docentes, directivos y personal auxiliar.
El diseño arquitectónico posee una fuerte impronta lineal con una circulación que define a doble crujía la ubicación de aulas, sanitarios y área administrativa hacia un lado y aulas especiales y salón de usos múltiples hacia el otro. Sobre un extremo de la circulación se propone una salida de emergencia y sobre el otro, un patio contemplativo a la Biblioteca.
El acceso se resuelve sobre un punto central que es el hall distribuidor, entre las áreas del colegio y a su vez nexo entre la calle y el patio.
El intendente de Arata, Henso Sosa, comentó que “este colegio desde sus inicios funcionó en el edificio del colegio primario y el campo de prácticas en un predio de 5 hectáreas lindantes al pueblo, lugar donde se está edificando el nuevo establecimiento educativo. En sus comienzos este colegio era privado, hace un tiempo se provincializó y su orientación que era agropecuaria hoy es bachiller. Tiene una matrícula de 100 alumnos y era una obra fundamental para nosotros”.
Sosa sostuvo a la Agencia Provincial de Noticias que “para la población es esencial porque van a funcionar de mejor manera, más cómodos y acorde a las necesidades, todas las aulas, salas, sanitarios y espacios de recreación están pensados para la función que debe cumplir”.
También se refirió a la importancia que tiene en Arata, “además este edificio le da un realce arquitectónico a la localidad y a esa zona en particular, que es uno de los sectores donde está creciendo la urbanización. Para nosotros es un gran orgullo y satisfacción lograr este objetivo y destacó el compromiso que demuestra el gobierno de la Provincia con Arata”, indicó el intendente Sosa.
Al evaluar la obra, su impacto social y económico, Henso Sosa, aseguró que “la empresa está llevando muy bien la obra, contrata mano de obra local y también adquiere materiales en el pueblo, lo que activa la circulación económica, repercute muy bien todo lo que genera la obra pública en nuestra localidad, da trabajo y es una política de Estado que favorece a las familias pampeanas”.
Características de la construcción
El inspector de Obra, Luis Trelles, especificó que “esta construcción consta de hall de acceso, seis aulas, un taller multipropósito, una biblioteca y sala de informática, un salón de usos múltiples, sanitarios de niños, de niñas y personas con discapacidad, área de gobierno (8 kit), sector de apoyo al salón, cocina y sanitarios para docentes y auxiliares. Está diseñado para un óptimo aprovechamiento de la iluminación natural, ventilación y circulación, cuenta con sistema de calefacción y refrigeración central”.
La obra se realiza bajo un sistema tradicional mixto, con estructura independiente, mamposterías dobles de ladrillos hueco y ladillo común a la vista, en su exterior revestimiento plástico texturable, aberturas de calidad, caños y elementos eléctricos acorde a la seguridad y propósitos que demandan sus funciones. Actualmente, en esta etapa, están trabajando quince personas y el estado de avance de la misma cumple con los plazos propuestos.