El gobierno nacional oficializó esta semana una controvertida medida financiera: mediante un decreto, ordenó que todos los organismos públicos y entes autárquicos inviertan sus excedentes en bonos del Tesoro nacional, con el fin de financiar al propio Estado a tasa cero. La disposición, impulsada por el ministro de Economía, Luis Caputo, implica la utilización de recursos que en muchos casos pertenecen a las provincias, incluyendo a La Pampa, sin que éstas reciban contraprestación alguna.
La noticia fue publicada originalmente por el portal LPO y replicada luego por fuentes oficiales en la provincia. Según los datos disponibles, al 30 de mayo el fondo acumulado rondaba los 959 mil millones de pesos, buena parte de los cuales corresponden a Aportes del Tesoro Nacional (ATN) no distribuidos. La provincia de La Pampa no figura entre las jurisdicciones que recibieron esos fondos.
La medida afecta a la totalidad de la Administración Nacional, incluyendo instituciones de Seguridad Social, empresas estatales, entes públicos y fondos fiduciarios compuestos con recursos nacionales. Solo quedaron excluidos los bancos públicos, el Congreso, el Poder Judicial y el Ministerio Público.
Uno de los casos más significativos es el del ente recaudador ARCA, que posee más de 700 mil millones de pesos como excedente. Según denunció el ex titular de la Aduana, Guillermo Michel, la mitad de ese dinero pertenece a las provincias, que no recibirán ni un centavo por esa inversión obligada en bonos nacionales. “Son el excedente de la compatibilización, con lo cual la mitad de la plata es de las provincias”, sostuvo Michel.
La falta de reacción de los gobernadores generó críticas. “Resulta llamativo que, tras reunirse esta semana en el CFI para protestar contra Milei, no intimaron a Nación por esta apropiación de fondos”, cuestionó el medio especializado.
Los efectos ya se sienten en el interior del país. Un municipio patagónico consultado denunció que la apropiación de recursos provocó quiebras en numerosas intendencias. “Los municipios son los que están financiando el supuesto equilibrio fiscal”, advirtió su intendente, al revelar que los ingresos coparticipables cayeron un 30% entre enero y abril.
La situación no es nueva. Un informe de la consultora Politikón reveló que, durante la gestión de Milei, los remanentes de ATN no ejecutados alcanzan $1,2 billones. Solo en 2024 se acumularon $900.000 millones sin distribuir. La Pampa, junto a otras siete provincias —CABA, Córdoba, Formosa, La Rioja, San Luis, Santiago del Estero y Tierra del Fuego—, no recibió ni un peso de esos recursos.
En cambio, Misiones, Salta y Neuquén fueron las más beneficiadas, acaparando más del 35% del total entregado. La propuesta de los gobernadores, presentada esta semana en el CFI, exige la eliminación del manejo discrecional y una distribución automática, tanto de los ATN como del impuesto a los combustibles, según criterios de coparticipación.
De implementarse esta reforma, La Pampa pasaría a recibir $57.000 millones más por año, es decir, $4.750 millones mensuales. Sin embargo, el gobierno nacional aún no dio señales de avanzar en esa dirección, y continúa utilizando fondos provinciales para cubrir su propio déficit.