Pablo Parra, de 37 años, es el hombre que encontró a la joven Agustina Fernández agonizando en su departamento de calle Confluencia al 1300. Sirvió a la causa como testigo, pero la Justicia ya reconoció que lo investiga, como investiga al joven del identikit y a otras personas que no han sido reveladas.
En las últimas horas, fue de público conocimiento la participación de Parra en una fiesta electrónica que tuvo lugar en la sede del sindicato Sthympra, en Fernández Oro, el sábado por la noche.
El hombre estuvo allí para disfrutar con otros amigos de la gira patagónica que realiza Miss Monique, una dj de Ucrania que amablemente accedió a la foto, en lo que se supone era su vip, desconociendo totalmente el contexto que lo envuelve al amigo de Agustina. Parra era uno más entre otros amigos que figuran en la foto.
Luego la foto se filtró en las redes y cayó muy mal. En pocas horas, cosechó cientos de mensajes que lo critican abiertamente. Incluso algunos de ellos son temerarios y le desean lo peor. Es que los usuarios de Facebook y otras plataformas no le perdonan a Parra que a tres semanas del crimen que sufrió la joven estudiante de Medicina y conmueve a la ciudad, salga a disfrutar de la noche, como se lo ve en la foto.
“¿Te imaginás entrar y ver a tu amiga temblando en el piso, inconsciente, con sangre. Y después así, como si nada, divirtiéndote?…Increíble”, lanzó una de las usuarias. “A mí me duraría el trauma. Él, muy frío”, señaló otra joven. “La última persona que vio con vida a Agustina sigue con su vida normal, mientras que a una mamá de La Pampa se le parte el corazón de dolor y clama Justicia”, fue otro de los mensajes más resonantes.
La bronca que se expresa en las redes a partir de la foto va en línea con las expresiones de la madre de Agustina, a quien nunca le cerró el relato que ofreció Parra a la Justicia y criticó que en las horas posteriores al hecho no se lo haya demorado para examinarlo. Es que a Silvana Cappello tampoco le cierra que hayan matado a su hija a golpes en su cabeza sólo por un robo. Cree, además, en una cara conocida. Y por eso no descarta la hipótesis de un femicidio.
Sin embargo, la Justicia pone sus fichas al identikit de un joven no identificado y ahora ofreció una recompensa de 1.000.000 de pesos para encontrarlo.