La Brigada de Investigaciones de General Pico fue escenario de una de las detenciones más insólitas registradas por la Policía local. Un foráneo con pedido de captura por un delito cometido en una localidad vecina, sin saber su condición de buscado, se presentó a visitar a su esposa detenida y en el mismo momento quedó él tras las rejas.
La mujer había sido detenida en los últimos días en la localidad de San Francisco (Córdoba) y trasladada a General Pico donde iba a ser formalizada. Ayer martes, a las 7:30 horas, se presentó la pareja para retirar efectos personales, como dinero y teléfono celular, y fue detenido ya que pesaba sobre él un pedido de captura por el mismo ilícito.
El delito se cometió a mediados del mes de junio en la localidad de Trenel, cuando una mujer mayor resultó estafada en cuatro millones de pesos y 5000 dólares. Se trató de un “cuento del tío” que los estafadores perpetraron a partir de un llamado telefónico, donde un supuesto familiar le advirtió que debía entregar los pesos y dólares a una persona que pasaría por su domicilio, ante un inminente corralito financiero que determinaría el cambio de denominación de sus billetes.
Una mujer se presentó en el domicilio de la damnificada y se llevó la importante suma de dinero. Horas más tarde la anciana descubrió que había sido estafada y dio cuenta de lo sucedido a la Policía.
El caso recayó en el fiscal adjunto Matías Juan, quien ordenó una serie de medidas con líneas telefónicas y cámaras de seguridad. Semanas más tarde, la Brigada logró encaminar la búsqueda sobre una mujer oriunda de General Villegas, pero con movimiento en el Gran Buenos Aires y otras provincias, a tal punto que fue detenida el pasado fin de semana en la localidad de San Francisco, Córdoba.