El diputado nacional y médico sanitarista Daniel Gollán alertó sobre el fuerte proceso de desfinanciamiento que atraviesa el sistema científico y tecnológico del país. “La ciencia está en terapia intensiva, con un pronóstico muy malo. No hay fondos, se paralizaron ingresos y los programas están prácticamente vaciados”, advirtió en la antesala del conversatorio “Democracia y conocimiento”, que se realizará este lunes en la Universidad Nacional de La Pampa.
La actividad se llevará a cabo entre las 10:30 y las 12:30 en el Salón del Consejo Superior de la UNLPam, con la participación de referentes del ámbito académico y científico como Silvina García Larraburu (Senado), Oscar Alpa (rector de la UNLPam y presidente del CIN), Alberto Baruj (vicepresidente del Conicet), Luz Lardone (directora del Conicet por organismos provinciales), Ana Franchi y Adriana Serquis (expresidentas de Conicet y CNEA), Yamile Sokolovsky (Conadu), Mario Romero (Apinta) y Oscar Galante.
Un sistema paralizado
En diálogo con Radio Noticias, Gollán criticó con dureza la política científica del gobierno nacional. “Estamos ante una situación de emergencia. El presupuesto real para ciencia este año apenas alcanza el 0,18 % del total nacional, cuando debería ser del 0,45 %. El Estado no envía los fondos y está incumpliendo la ley”, sostuvo.
Además, denunció que se congelaron ingresos al Conicet, no se habilitan nuevas líneas de investigación y muchos laboratorios se encuentran sin recursos para funcionar. “Hace más de un año que no entra ni un solo proyecto. Antes ingresaban unos 8.000 por año. Hoy, ni uno. Es desolador”.
Retroceso ideológico
El diputado fue más allá y apuntó contra el trasfondo político de la situación: “Es una decisión ideológica, absolutamente retrógrada. Este gobierno cree que la ciencia debe financiarla solo el sector privado, algo que en la práctica no ocurre. Mientras tanto, se pierden talentos y proyectos de vida. Hay investigadores que ya no pueden sostenerse con sueldos de 900 mil pesos. Algunos se van del país, otros abandonan la carrera científica”.
Según Gollán, “las empresas que se benefician de las investigaciones públicas no alzan la voz por miedo a represalias. Estamos ante un gobierno autoritario que aprieta a quien piensa distinto. Muchos empresarios temen hablar porque después reciben inspecciones o trabas. Es una situación muy grave para la democracia”.
El costo de exportar conocimiento crudo
El legislador también se refirió a la reciente noticia sobre el hallazgo de un gran yacimiento de minerales en San Juan. “Ahí se ve claramente el valor estratégico de la ciencia. Si no tenemos tecnología para procesar esos recursos en el país, terminamos exportando materia prima sin valor agregado. Es un saqueo. La ciencia no es un lujo, es la clave para el desarrollo”, afirmó.
Asociación público-privada
Gollán destacó, sin embargo, que existen experiencias positivas de colaboración entre el Estado y el sector privado. “Hay polos tecnológicos en el país donde se trabaja bien y se genera valor. Pero para eso hace falta voluntad política, inversión y una mirada de largo plazo. No podemos desmantelar todo lo construido y esperar que el sistema se recomponga solo”.
Por último, hizo un llamado a la sociedad: “Esto no es una cuestión partidaria. Hay que defender la ciencia como política de Estado. Si no, nos condenamos a ser un país sin futuro”.