El conflicto entre el Ministerio de Educación y las tres empresas que prestan el servicio de transporte escolar en la capital continúa afectando a 1,500 estudiantes de primaria y secundaria. Desde hace una semana, las empresas suspendieron el transporte a las escuelas públicas, dejando a miles de chicos sin este servicio esencial.
Los empresarios atribuyen la suspensión al Ministerio de Educación, citando la falta de contratos y retrasos en los pagos. La ministra de Educación, Marcela Feuerschvenger, declaró que el problema se resolvería pronto. Explicó que el Tribunal de Cuentas canceló la licitación original debido a presuntos sobreprecios, pero aseguró que están trabajando para llegar a un acuerdo a través de una contratación directa.
Sin embargo, las empresas niegan las acusaciones de sobreprecios. En declaraciones a Radio Kermes, confirmaron que esperaban una llamada del gobierno durante la tarde de ayer para resolver el problema y reanudar el servicio, pero esto no ocurrió. Como resultado, el transporte escolar sigue suspendido, manteniendo a los estudiantes sin acceso a este importante medio de transporte para asistir a sus clases.