Pablo Parra, declarado unánimemente culpable por un jurado popular del femicidio de Agustina Fernández, recibió la condena de prisión perpetua. Seguirá en prisión hasta que se resuelva la apelación.
Durante el juicio de cesura, se discutió la imposición de la prisión preventiva. La audiencia, iniciada a las 8:30 en los tribunales de Cipolletti, fue un formalismo necesario para oficializar la sentencia. El juez Guillermo Baquero Lazcano ya había adelantado la pena en la última audiencia del juicio.
Parra asistió a la audiencia sin pronunciar palabra, manteniéndose en silencio mientras los acusadores detallaban nuevamente el brutal asesinato de Agustina Fernández.
El fiscal jefe Santiago Márquez Gauna y los querellantes, en representación de Silvana Capello y Mariano Fernández Barreiro, Emanuel Roa Moreno y Damián Moreyra, solicitaron la continuidad de la prisión preventiva hasta que el fallo sea definitivo, argumentando el riesgo de fuga.
El abogado defensor, Juan Manuel Coto, consideró “lógico” el pedido de la medida preventiva tras el veredicto condenatorio, y no se opuso a que Parra permanezca en prisión.
El juez Baquero Lazcano justificó la prórroga de la prisión preventiva debido al alto riesgo de fuga que representa una persona ya condenada a una pena tan severa. Así, mantendrá a Parra en prisión hasta que el Tribunal de Impugnación se pronuncie.
Coto, por su parte, confirmó que apelará la condena, buscando revertir la declaración de culpabilidad de Parra.
El crimen ocurrió el 2 de julio de 2022 en Cipolletti, Río Negro. Tras ocho jornadas de declaraciones y evaluación de pruebas, el jurado concluyó que Parra es responsable del asesinato de la joven estudiante de 19 años.
El juicio, iniciado el 6 de mayo, concluyó con los alegatos finales y la deliberación del jurado. El juez Baquero Lazcano instruyó a los jurados a debatir seriamente basándose en la evidencia presentada, recordándoles sus tres opciones de veredicto: culpable de femicidio, culpable de homicidio simple o no culpable.