En una tarea poco usual, los Bomberos Voluntarios de General Pico rescataron ayer, alrededor de las 15:30 horas, a dos personas que quedaron atrapadas en un ascensor de un complejo de departamentos ubicado en la intersección de las calles 11 bis y 122.
El incidente, que tuvo lugar en la planta baja del edificio, fue reportado por un vecino alertado por los gritos de los atrapados. Los bomberos recibieron el llamado de dos personas que se encontraban atrapadas en un ascensor. Llevaban aproximadamente 45 minutos atrapados, explicó uno de los bomberos que participó en el rescate. Las personas atrapadas, un joven y una joven, habían intentado sin éxito contactar a los servicios de emergencia del ascensor.
Al llegar al lugar, los bomberos utilizaron herramientas especializadas para abrir manualmente las puertas del ascensor. Interviniendo con las llaves especiales que se tienen para destrabar de manera manual las puertas, y una vez que se inhabilita el seguro, se pueden manipular las dos puertas, tanto la externa como la interna del ascensor para abrirlas y que puedan salir.
El problema se debió a un fallo en el tablero electrónico del ascensor, que marcaba erróneamente que la puerta estaba abierta, bloqueando el sistema. Las personas atrapadas cuando llegaron a planta baja y el tablero adentro se les marcaba un error, como que la puerta estaba abierta, pero el sistema no se movía, la puerta no abrió nunca.
Una vez en el lugar, los bomberos utilizaron una llave especial para desactivar el seguro manual del ascensor, lo que les permitió abrir las puertas y liberar a los atrapados. “Esa puerta se destraba y ya te permite manipularla de forma manual. Saca el sistema de seguridad y con las manos o con una palanca podés empujar la puerta y liberas todo el sistema”, explicó una fuente bomberil.
Afortunadamente, el ascensor había descendido completamente hasta la planta baja, evitando cualquier riesgo de caída. “En este caso, bajó completamente hasta abajo, quedó bien asentado y al abrir la puerta estaban los dos chicos tranquilos, estaban sentados charlando.”
Para futuros casos similares, el consejo es claro: mantener la calma y contactar a los bomberos o al técnico de mantenimiento del edificio.