Como otra manera de agilizar los procesos, y por lo tanto satisfacer más rápidamente las demandas de la sociedad pampeana; el Poder Judicial amplió la capacidad del fuero de familia de la Segunda Circunscripción, con sede en General Pico, con la apertura de un tercer juzgado y un nuevo modelo de gestión.
De acuerdo a lo resuelto por el Superior Tribunal de Justicia, desde hoy comenzó a funcionar en esa ciudad el Juzgado de la Familia, Niñas, Niños y Adolescentes N° 3 y la Oficina de Gestión Judicial para los Juzgados de la Familia, Niñas, Niños y Adolescentes. Por ese motivo la semana pasada juraron Alicia Paola Loscertales y Sergio Hernán Freigedo, como jueza y secretario sustitutos de ambos organismos, respectivamente.
El paso dado por el STJ forma parte de los objetivos fijados oportunamente en el documento denominado “Planificación Estratégica Consensuada del Poder Judicial de La Pampa”, aprobado a fines de 2020, donde a partir de una diagnóstico de la situación del servicio de justicia –en medio de la pandemia– se establecieron acciones a mediano y largo plazo, fijándose objetivos.
El antecedente de esta resolución del STJ data de agosto de 2022, cuando en Santa Rosa –cabecera de la Primera Circunscripción Judicial– se abrieron el Juzgado de Familia, Niñas, Niños y Adolescentes 3 y la Oficina de Gestión Judicial.
Por eso, el presidente del STJ, José Roberto Sappa, al hablar durante el acta de las juras, hizo referencia al afianzado funcionamiento de las Oficinas Judiciales en el fuero penal desde 2011, y agregó que “ahora nos toca a nosotros, los que no somos del derecho penal. Es un hecho histórico porque cambiamos todo el sistema de los juzgados tradicionales y comenzamos justamente con los juzgados más complejos por la temática, como son los juzgados de familia, por lo tanto también es un desafío”.
Celeridad
Un cambio sustancial en la gestión estará dado porque a partir de ahora los jueces y juezas de familia ya no tendrán a su cargo cuestiones administrativas y se dedicarán exclusivamente a la resolución de los conflictos. Además, la apertura del Juzgado de Niñas, Niños y Adolescentes 3 –al disponerse la reasignación de causas– permitirá descongestionar de trabajo a los dos juzgados existentes, repartir los expedientes entre los tres tribunales y agilizar el diligenciamiento de los procesos.
A modo de ejemplo, vale remarcar que el año pasado los Juzgados 1 y 2 tramitaron medio millar de causas cada uno (966 en total), lo que significó el 29 por ciento de los expedientes ingresados en el fuero civil piquense.
A su vez, con la puesta en marcha de la OGJ en General Pico se pretende crear “una nueva forma de organización del trabajo diario de los tres juzgados, para lograr una capacidad mayor de respuesta en los procesos; teniendo en especial consideración el ingreso de causas, su complejidad y la celeridad en su resolución”.
La OGJ es un organismo que está conformado por la totalidad de los funcionarios/as y los/las agentes de los Juzgados de la Familia, Niñas, Niños y Adolescentes 1, 2 y 3 y que tiene como objetivo “gestionar los recursos materiales, el personal y los procesos administrativos y jurisdiccionales, asistiendo en la gestión y tramitación de las causas que ingresan para su conocimiento”. Organizativamente dependerá de la Secretaría Técnica del STJ.
Sus funciones –de acuerdo a lo detallado por el STJ en el acuerdo 20/2024– son “planificar, organizar, dirigir y controlar los procesos de trabajo y recursos de los juzgados para mejorar la calidad del servicio de justicia; asistir a los magistrados/as en la función jurisdiccional durante todo el proceso judicial; llevar adelante la gestión administrativa de los recursos materiales y humanos; coordinar y gestionar acciones institucionales con organismos internos y externos al Poder Judicial; y unificar criterios jurisdiccionales en el proceso de despacho, articulando con los magistrados las divergencias que adviertan los responsables de las unidades de la OGJ”.
La Oficina tendrá un coordinador/a y está conformada por cinco unidades (una de atención primaria, tres de despacho y una de audiencias). Cada una tendrá un funcionario/a responsable.
La totalidad del personal que se desempeñaba en los juzgados pasó a depender funcionalmente de la OGJ, fue reubicado en las cinco unidades y prestará un servicio común para los magistrados/as de los tres juzgados en forma indistinta. Ellos y ellas “actuarán de acuerdo a principios generales de flexibilidad de organización, para asegurar un funcionamiento dinámico, eficiente y eficaz, bajos las premisas de trabajo en equipo, responsabilidad en la gestión, coordinación, cooperación, control y supervisión”.
Por último, en la OGJ habrá una subunidad, denominada de Equipos Técnicos (SUET), que quedó integrada por los equipos técnicos de cada juzgado y funcionará de manera unificada.