La Justicia Federal investiga a Valentina Olguín, una influencer y cantante oriunda de Santiago del Estero, acusada de utilizar datos fiscales de varios gobernadores, entre ellos el pampeano Sergio Ziliotto, para realizar compras de ropa en Estados Unidos. Según la investigación, Olguín sería la figura visible de una organización dedicada a adquirir grandes volúmenes de prendas utilizando información fiscal de altos funcionarios y otras personas.
La causa se inició en Tucumán pero fue derivada a los juzgados federales de las provincias involucradas. La joven, que cuenta con miles de seguidores en redes sociales y una carrera musical vinculada a bandas populares como Q’ Lokura, habría utilizado los CUIT de los gobernadores para realizar compras online desde su domicilio en el barrio porteño de Núñez. Luego, ofrecía las prendas en sus redes sociales, promocionándolas a través de publicaciones donde exhibía distintos looks.
El rol de Ziliotto
Fuentes cercanas al gobierno pampeano confirmaron que Ziliotto fue citado a declarar como testigo en la causa. Desde el entorno judicial aclararon que ninguno de los mandatarios afectados –entre ellos también Osvaldo Jaldo (Tucumán), Axel Kicillof (Buenos Aires), Claudio Poggi (San Luis) y Rogelio Frigerio (Entre Ríos)– sufrió perjuicios económicos, y que su vinculación se limita a la utilización no autorizada de sus datos.
“La sola mención de los gobernadores no los convierte en damnificados directos del delito”, aclararon voceros judiciales, al tiempo que señalaron que el hecho podría no constituir un delito federal.
Origen del caso
El expediente se abrió cuando el gobernador tucumano Osvaldo Jaldo recibió una notificación sobre una compra que no había realizado. Al presentar la denuncia, el fiscal Agustín Chit inició una investigación que reveló el uso indebido de datos de otros mandatarios, incluyendo al bonaerense Axel Kicillof, quien también denunció una situación similar.
Durante un allanamiento en el domicilio de Olguín se encontraron prendas de vestir, electrodomésticos y documentación que confirmaría el patrón delictivo. Según el fiscal, la joven admitió que había excedido su cupo de compras y que los datos fiscales los obtenía de internet, argumento que no convenció a la Justicia.
Ventas y redes sociales
La influencer, de 26 años, no contaba con tienda física. Utilizaba sus redes para mostrar la ropa y captar clientes interesados. “Usaba sus publicaciones como gancho de venta, mostrando prendas de alta gama adquiridas a precios reducidos”, explicó el fiscal Chit.
La Justicia aguarda ahora una decisión del juez José Manuel Díaz Vélez sobre la situación procesal de Olguín, que podría conocerse esta misma semana. La investigación continúa para determinar el alcance real de la maniobra y si existen otras personas implicadas en la red.